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Las imágenes más espectaculares de la apertura de los Juegos

Sábado, 24 de julio 2021, 03:25

Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.

Agencias
Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.
Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.

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Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.
Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.

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Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.

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Los Juegos que más se han demorado han dado finalmente arranque tras más de un año. La ceremonia de inauguración, en la que las delegaciones desfilan cada cuatro años ante unas gradas entusiastas, fue en esta ocasión un acto desangelado, debido a la ausencia de público en las competiciones. Sin embargo, algunos rituales se repitieron, como el del encendido del pebetero, uno de los secretos mejor guardados en cada cita y que en esta ocasión consistió en un recipiente esférico inspirado en el Sol. La delegación española, de la que se muestran imágenes, estuvo abanderada por el palista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte.
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