«La gente asocia la altura al riesgo y no es así»

Para llegar a la cima en la escalada, al igual que en otras disciplinas deportivas, es necesario un sólido primer paso. En la modalidad de paraescalada, son las condiciones físicas las que estructuran la competición. La Federación Internacional de Escalada Deportiva (IFSC) necesita confirmar que los participantes reúnen los requisitos necesarios para luchar por el oro en las diferentes categorías que la componen (discapacidad sensorial, invidentes y pierna amputada) y les somete a un reconocimiento que da el visto bueno a ese reparto de escaladores.

A lo largo de un examen que se prolonga hasta ocho horas, Paola Gigliotti y Francesco Cosie, personal médico de la IFSC, confirma las categorías de los inscritos y les da el respaldo definitivo para que inicien su camino a la cima este jueves. «No hemos detectado ninguna anomalía. Simplemente anotamos cuál es su discapacidad para categorizarlos», señala la doctora Gigliotti, que en Gijón participa en esta revisión, pero en otras competiciones lo hace como servicio de asistencia en competición. La galena italiana remarca la seguridad de este deporte, al contrario de la extendida opinión que lo cataloga como un deporte de riesgo. Gigliotti ha asistido a los deportistas en cuatro competiciones y sólo recuerda tres contratiempos físicos, dos de ellos por simples sobrecargas.

«La gente piensa que por estar en las alturas es más peligroso y asocia altura a riesgo. No es así. Incluso en la gimnasia, en la que los pies de los participantes están en el suelo, se sufren más lesiones que en la escalada», señala Gigliotti, que confiesa que no ha visto ninguna anomalía en los participantes que visitaron la enfermería del Palacio de Deportes en la jornada de ayer.

Aunque en esta ocasión sólo estará presente para este preventivo chequeo, Gigliotti cuenta con varios años de experiencia vinculada a la asistencia médica de este deporte. Una dilatada trayectoria que le permite asegurar que los escaladores apenas sufren lesiones, aunque advierte una relación directa entre la experiencia y el nivel deportista con su propensión a ser presa de esas dolencias. A mayor destreza en el rocódromo, menores infortunios. Los profesionales de la medicina ya han dado su respaldo, a partir de hoy les toca asegurar el espectáculo a los auténticos protagonistas. Ya está abierto el camino hacia la cima.