Duro Felguera y la banca discrepan sobre la viabilidad económica de la empresa

El pasado 13 de junio se reunieron en Madrid, a petición de la empresa, las entidades que forman el 'pool' bancario de acreedores de Duro. En este encuentro la empresa les presentó un plan que incluía, entre otras peticiones, una quita del 100% de la deuda que mantiene con los bancos y de las obligaciones de la compañía (85 millones corresponden a lo primero y 233 a lo segundo). Una propuesta que fue rechazada por las entidades, con el Santander a la cabeza, como banco principal del 'pool' y con el que Duro tiene contraída una deuda de 222 millones de euros.

El plante de los bancos se debe, según apuntan fuentes financieras, a que la deuda de la compañía asturiana aumentó en 155 millones de euros durante el pasado ejercicio.

A juicio del 'pool' bancario, la sitación económica de la compañía hace que Duro Felguera esté «abocada» a afrontar un concurso de acreedores.

Estas entidades recuerdan que el acuerdo suscrito con Duro Felguera hace un año incluía el cambio de 233 millones de euros de deuda por obligaciones convertibles y la refinanciación de 85 millones, entre otras medidas.

Este pacto llevaba aparejado un plan de negocio que debía elaborar Duro Felguera y que meses después de la firma de ese acuerdo la propia compañía reconoció en una carta a la banca que no se ajustaba a la realidad: «Se han identificado deteriores adicionales en ciertos proyectos que fueron registrados en las cuentas anuales de 2018», detallaba en esa misiva. Se tratan de «deterioros» que, apuntan fuentes consultadas por EL COMERCIO, solo dos meses después de la ampliación de capital, ascendían ya a 153 millones de euros.

A esta situación se suman los problemas de tesorería que atraviesa Duro Felguera y que le impide garantizar la ejecución de los proyectos que tiene en cartera y también concurrir a nuevos concursos que le permitan ganar contratos.

Como solución, la compañía asturiana presentó al 'pool' bancario en su reunión del pasado 13 de junio una propuesta que incluye la petición a las entidades financieras de una quita del 100% de la deuda; abrir una línea de liquidez de más de 22 millones, y disponer de avales por 60 millones para proyectos en curso. A cambio, desde Duro Felguera se ofrece a los bancos convocar una nueva ampliación de capital. Se trata de una alternativa que no respalda la banca, puesto que supondría asumir por parte de las entidades riesgos de 212 millones de euros.

Las entidades bancarias no aceptan la propuesta. En primer lugar porque entienden que los márgenes de negocio -la compañía prevé unas ventas de 1.200 millones de euros entre 2019 y 2021 y un resultado bruto de explotación de 34 millones en ese periodo- que se plantean son pequeños y porque los bancos tienen que asumir más de 280 millones de pérdidas por proyectos, según apuntan «fracasados».

Desde Duro Felguera se negó ayer que la radiografía de su situación financiera sea la que presentan desde la banca. En un comunicado, la compañía afirma que continúa con el proceso de negociación con sus bancos acreedores «con el objetivo de llegar a un acuerdo de financiación y cumplir así con su plan estratégico».