La gran industria recibirá menos de la mitad por la subasta eléctrica que hace dos años

No se esperaban grandes retribuciones, sobre todo porque la subasta eléctrica convocada para la segunda mitad del año ya partía con peores condiciones que las anteriores, pero con los resultados oficiales el panorama es desolador. El pago que recibirá la gran industria por desconectarse de la red si el operador lo solicita, un mecanismo que le permite rebajar su abultada factura energética, será en este 2019 un tercio inferior al de 2018 y cae por debajo de la mitad que hace dos años.

Red Eléctrica ha publicado ya los datos validados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia para el periodo entre el 1 de julio y el 31 de diciembre y fija en 95 millones de euros la retribución por el servicio de interrumpibilidad para esta mitad del año. En la primera fueron 101 millones, lo que significa que la cifra anual estará por debajo de los 200, cuando el ejercicio anterior rondó los 300 y el precedente se alcanzaron los 500.

Esta caída se produce en plena crisis de la industria, que pierde peso en el PIB y que, en algunos sectores, está sufriendo un serio deterioro, como es el caso del siderúrgico, con los recortes anunciados por ArcelorMittal en Asturias, que en un principio fueron cifrados en el 16% de la producción, pero que ahora podrían superar el 25% y que llevarán a regular a gran parte de la plantilla de la multinacional siderúrgica. Estas decisiones se tomaron antes de recibir este nuevo mazazo que supone un obstáculo más para aliviar su factura energética sin que, además, se haya aprobado el prometido estatuto para las electrointensivas ni se confirme el aumento a 200 millones de las compensaciones por el CO2, puesto que se condiciona ese incremento a tener disponibilidad presupuestaria.

En este caso, se han subastado 16 bloques de 40 MW y 340 de 5 MW, un total de 2.340 MW en una subasta en la que han participado 123 grandes consumidores. El precio medio de asignación para los primeros ha sido de 96.925 euros por MW y de 75.307 MW para los de 5 MW. Esta es la primera puja a la que no concurren las factorías de Alcoa de Avilés y La Coruña, que al presdindir de sus cubas de electrólisis dejaron de ofrecer este servicio al operador.

La Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía, en la que se integran compañías como ArcelorMittal o Asturiana de Zinc, que han concurrido a esta subasta, ya advirtió hace seis meses que había factorías que peligraban con los resultados de entonces. Los de ahora son aún peores.