Asturias lidera la subida del paro en España con 2.342 nuevos desempleados, un 3,78% más
El fin de la temporada navideña lastra el mercado laboral regional, cada vez más estacionalizado, que pierde 4.382 afiliados a la Seguridad Social
N. A. E. | LUCÍA PALACIOS
Jueves, 2 de febrero 2023, 09:37
Ni siquiera la temporada de rebajas ha salvado el mercado laboral asturiano en el inicio del año. Después de que la Encuesta de Población Activa (EPA) del último trimestre de 2022 fuera muy negativa, los datos de paro registrado de enero también reflejan una mala dinámica. De hecho, el Principado encabeza el incremento del desempleo en el país, con una subida el pasado mes del 3,78%, muy superior a la media nacional del 2,49% y por encima de los aumentos del resto de comunidades. Solo Madrid se acerca, con un 3,74%. El alza implica que las oficinas del Servicio de Empleo del Principado de Asturias (Sepepa) sumaron 2.342 nuevos inscritos el primer mes de 2023, la mayoría procedentes del sector servicios (+2.125), pero también del resto de áreas de actividad, hasta los 64.229 desempleados, según ha informado el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Pero si preocupante es el aumento del paro, quizás lo sea aún más la destrucción de empleo. La comunidad perdió el pasado mes 4.382 afiliados a la Seguridad Social, lo que supone un descenso del 1,18%, con lo que se rebaja la barrera psicológica de los 370.000 hasta dejar la cifra de cotizantes en 368.114. A nivel nacional también se produjo un retroceso, de 215.046 personas (-1,06%). El total se queda ligeramente por encima de los 20 millones.
Por otro lado, contratación se desplomó el pasado mes en Asturias un 9,70% (-1.845), hasta 17.169 contratos, prácticamente un tercio de ellos indefinidos (5.728), casi un 15% más.
En clave interanual, el desempleo continúa cayendo en la comunidad, lo hace en 2.060 personas, un 3,11%, pero el Principado se sitúa en el furgón de cola en cuanto a la intensidad de ese descenso. El promedio nacional más que duplica la bajada asturiana, se sitúa en un 6,87%, y solo Aragón (-2,92%), Castilla-La Mancha (-0,73%), Murcia (-1,55%), Navarra (-2,5%) y País Vasco (2,62%) registran reducciones inferiores. Las contrataciones se desplomaron un 26,5%, por las limitaciones a la temporalidad, que ha disparado las indefinidas un 65,6% en el último ejercicio.
La directora gerente del Sepepa, Pilar Varela, destaca sin embargo aspectos positivos, como que Asturias finalizó enero con la cantidad más baja de parados para ese mes desde 2008, que acumula 22 meses de descensos interanuales consecutivos o que el incremento absoluto es el segundo menor en 22 años, tras los 1.491 de 2022. Aboga, además, por fortalecer las políticas de empleo.
Por su parte, el director de apoyo corporativo en Federación Asturiana de Empresarios (Fade), Ignacio García, ve como «el dato más preocupante» la caída de la afiliación, sobre todo porque a nivel nacional esta incrementa un 2,3% interanual, frente al 0,4% asturiano. En este sentido, asegura que «adquiere una especial relevancia la necesidad de introducir cuanto antes reformas e implementar medidas que refuercen la recuperación y la creación de empleo».
La responsable de Igualdad de CC OO de Asturias, Úrsula Szalata, no pone paños calientes a la situación y califica los datos de «muy malos». «Las prioridades son crear empleo de calidad y ampliar las medidas de cobertura para las personas que están en paro, y apostar firmemente por la industria», defiende. Y la secretaria de Política Sindical de UGT Asturias, Mar Celemín, apunta que la tendencia asturiana va, en cierta forma, acompasada con la nacional, pero constata «una mayor debilidad del mercado de trabajo» regional, que espera que pueda mejorar a medida que avance el año. Destaca, igualmente, la mejoría en la calidad del empleo que ha supuesto la reforma laboral.
«No solo es el fin de los contratos de las campañas del comercio, es también la mala gestión de los contratos públicos. El 31 de enero se vivió una situación esperpéntica en Sanidad, con fin masivo de contratos», denuncia, por su parte, Miguel Rivero, coordinador de USO-Asturias. Y llama la atención sobre los 16.055 demandantes de empleo que no aparecen como parados, sino como ocupados, ya que «muchos de ellos obedecen a la fiebre de los contratos fijos discontinuos».
El retroceso del mercado laboral regional, cada vez más estacionalizado, se produce en un contexto de desaceleración global, aunque en Asturias este se intensifica. El brío que mantuvo el empleo durante el último año y medio en España llegó a su fin y los malos pronósticos que dejó diciembre se están acentuando en este inicio de 2023: en enero se perdieron en toda España más de 215.047 afiliados y se sumaron 70.000 parados más, en relación al mes anterior (+2,48%) tras el fin de la campaña de Navidad.
Es cierto que enero es un mes que habitualmente deja malas noticias para el mercado laboral por el fin de la campaña de Navidad y también es cierto que fueron peores los dos eneros precedentes, pero con estas dos excepciones, hay que remontarse hasta 2013, en plena Gran Recesión, para superar este mal dato.
Además, la ralentización del mercado de trabajo español, que hasta ahora había resistido con coraje a la guerra en Ucrania y a la escalada de los precios, se evidencia en el hecho de que el ritmo de creación de empleo se ha reducido prácticamente a la mitad en este último año. Así, si en enero de 2022 la afiliación crecía a un ritmo del 4,2%, ahora ha caído hasta el 2,3%, el peor nivel desde marzo de 2021 y muy por debajo de los porcentajes que se registraban durante el periodo de recuperación económica de 2015 a 2019.
La Seguridad Social vuelve a caer por debajo de la barrera de los 2,1 millones de afiliados nueve meses después de conquistarla de nuevo tras pandemia y se sitúa en 20.081.224. En términos desestacionalizados, no obstante, roza los 2,3 millones de cotizantes tras sumar 57.726 en enero, según destaca el ministerio dirigido por José Luis Escrivá, que señala que es el sexto mes consecutivo en el que aumenta el número de ocupados.
Por otra parte, el aumento de más de 70.000 parados es inferior al incremento medio de 81.424 personas o a los más de 100.000 en años previos a la pandemia, según destaca el departamento de Trabajo. En cualquier caso el número total de desempleados asciende ya por encima de los 2,9 millones