«Habrá pensiones, pero serán distintas»

El futuro de las pensiones es un tema candente. Los asturianos se están jugando el poder mantener cierto nivel de vida el día que se jubilen. Por ello EL COMERCIO con el patrocinio del Banco Sabadell han organizado la jornada 'El futuro de las pensiones' que contó con la presencia del director del diario, Marcelino Gutiérrez, y el director de Banca Comercial de SabadellHerrero, Alfredo Fernández Santos.

Durante la jornada, se ha realizado un análisis de la situación de uno de los temas que más preocupa a la ciudadanía. Para ello la jornada ha contado con las ponencias de Inmaculada Domínguez Fabián, doctora en Ciencias Económicas y Empresariales y experta en sistemas públicos y privados de pensiones; Jaime Viladomiu, director de Previsión Empresarial en banco Sabadell; y Olimpia del Águila Cazorla, responsable de Seguridad Social de CEOE y miembro del Comité Consultivo de Coordinación de los Sistemas de Seguridad Social del Consejo de Europa.

A la hora de abordar las pensiones hay que tener en cuenta tres factores importantes. El nivel de vida, es decir, intentar mantener el mismo cuando llegue la jubilación, la esperanza de vida, que se ha incrementado exponencialmente, y la incertidumbre.

«Habrá pensiones, pero serán distintas», afirmó Inmaculada Domínguez quien pidió dejar de lado posturas catastrofistas y paternalistas. Así, Domínguez afirmó que en dos décadas las pensiones estarán reguladas por la reforma del 2011 (que será de plena aplicación en 2027) y que supone el incremento de la edad de jubilación a los 67 años; que a partir de 2022 se calcule a partir de los últimos 25 años; y la tendencia es que la pensión se calcule sobre todas las cotizaciones. «Esto va a suponer que nos jubilaremos más tarde, calculando nuestra pensión con más años y se exigirán más años de cotización», señala.

Respecto a la reforma del 2013, que tendría que haber entrado en 2019 y se pospone hasta 2023, incidirá en que cada vez hay una supervivencia mayor «y esto supondrá que las generaciones más jóvenes tendrán un factor de sostenibilidad más bajo». «Dentro de 20 años las pensiones públicas se mantendrán, porque se basa en el sistema de reparto, pero tendrán una reducción», concluyó.

Por su parte, Jaime Viladomiu insistió en que es importante saber la estimación de qué pensión tendrán los ciudadanos cuando se jubilen. «Es muy importante porque si visualizamos qué vamos a percibir del estado vamos a visualizar cuál es nuestra necesidad de ahorro para complementar la pensión pública», indicó. Respecto a las soluciones, Viladomiu señaló los planes de pensiones de empleo, los planes de pensiones de promoción conjunta, y los seguros colectivos.

Viladomiu apostó por tener más información ya que cuanta más información tenga la gente «mayor comprensión tendrá de la pensión complementaria y también de la necesidad o no de complementarla adicionalmente». También señaló la importancia del consenso político, con patronales y con representantes sociales. Finalmente pidió una estabilidad legislativa «que no significa que sea inamovible», sino que debe adaptarse a la nueva realidad.

Para Olimpia del Águila el diseño de la seguridad social «es un asunto de estado». Para crear ese «ideal de cobertura suficiente» uno de los pilares fundamentales es el diálogo social. Entre los retos señaló el del conocido como 'baby boom', «cómo vamos a absorber esa protección suficiente a esa generación; o cómo va a impactar las nuevas formas de trabajo y la llamada revolución 4.0. Asimismo, señaló que el compromiso de la empresa con la Seguridad Social, y apostó porque las reformas no sean cortoplacistas ni partidistas «y alzar la mirada a lo que se va a requerir de nosotros en las próximas tres décadas».

«Nosotros abogamos por el consenso en el marco del Pacto de Toledo lo ha habido, y trabajamos para que exista en el diálogo social. las pensiones son un asunto de estado y nos obliga a todos», recalcó.