España ya tiene siete maravillas gastronómicas
La fabada asturiana se queda fuera de la lista definitiva tras una votación a través de internet
Miguel Llano
Jueves, 25 de agosto 2016, 12:06
Será por el calor, pero la fabada asturiana se ha quedo fuera de la votación para elegir las siete maravillas gastronómicas de España, en detrimento de otros platos como los paparajotes murcianos, n postre a base de hojas de limonero recubiertas con una masa de harina y huevo y pasadas por la sartén. Junto a los papajarotes han sido elegidos las papas arrugadas canarias, el jamón ibérico, el pulpo a la gallega, la paella valenciana, la tortilla de patatas y la quesada pasiega cántabra.
Han votado 60.000 personas en este concurso que buscaba promover la candidatura de la gastronomía española a patrimonio inmaterial de la humanidad por la Unesco, como ya han conseguido la japonesa, la mexicana y la francesa, además de la dieta mediterránea, y para defender su importancia como expresión cultural con raíces históricas.
Así, en un principio, se seleccionaron veinte platos finalistas, entre los que estaban el gazpacho andaluz, la fabada asturiana, el cocido madrileño y el pisto manchego, y durante agosto se organizó una votación popular en la web del proyecto.
Ante notario se han validado 61.834 votos, que han determinado las siete maravillas gastronómicas de España, anunció ayer su promotora, Allianz Global Assitance, a la que se sumaron la Federación Española de Hostelería y la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, escuelas de hostelería y restaurantes.
«Hemos conseguido que durante el actual mes de agosto la gastronomía nacional haya sido uno de los temas más comentados, defendidos y reconocidos, un elemento sin el que no se comprende nuestra marca-país», destacó la responsable del proyecto, Sonia Rodríguez, en alusión al tráfico de la web y en las redes sociales.
La página oficial de las siete maravillas gastronómicas de España ha recibido más de 400.000 visitas, un 18 % desde el extranjero, por lo que los organizadores dan por cumplido el objetivo de defender y difundir «una gastronomía nacional fundamentada en el vigor de las cocinas regionales».
Sin embargo, que platos cuya relevancia gastronómica como la fabada asturiana o el gazpacho andaluz se hayan quedado fuera, plantea serias dudas sobre si esta es la mejor forma de difundir la gastronomía nacional. Amén de la no inclusión en la misma de ningún queso.
No se han hecho esperar las bromas, y la publicación humorística Al platu vendrás arbeyu ha decidido apoyar una campaña para que quienes hayan votado los paparajotes en detrimento de la fabada se queden «sin derecho a voto» en próximas elecciones.