El superalimento que te ayuda a dormir mejor y es antiinflamatorio

Es uno de los alimentos de moda. El kéfir se ha convertido desde hace unos años en uno de los derivados lácticos más populares de los supermercados. Esta especie de yogur o bebible (dependiendo de la composición de cada producto) se ha destapado como uno de los alimentos más completos, gracias a sus beneficios para la salud.

Además de la bebida, el nombre 'kéfir' se le atribuye también a los gránulos con los que se fermenta la leche como al producto resultante, que es un probiótico ya que contiene una variedad de microorganismos beneficiosos para la salud intestinal. Se ha sugerido que el consumo regular de kéfir puede tener efectos positivos en la digestión, el sistema inmunológico y la salud en general ayudando a desinflamar y mejorando la calidad de nuestro sueño. Incluso varios estudios han demostrado su acción anticancerígena sobre diversos tipos de células cancerosas.

Los granos de kéfir solo se pueden cultivar a partir de la división de otros nódulos de kéfir previamente cultivados. Para su preparación se introducen en un recipiente de vidrio o cristal la leche a temperatura ambiente y los granos de kéfir, se cierra con tapa hermética (teniendo en cuenta que hay que dejar espacio o abrir frecuentemente ya que se produce gas durante la fermentación); es habitual también tapar con un paño de tela con un cordel. Se deja a temperatura ambiente, entre 12-36 horas, y si es posible removiendo o agitando cada 8 horas o menos. Tras este tiempo, se cuela el líquido resultante con un colador o filtro.

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