El Ayuntamiento ordena demoler todo el interior del colegio que haya perdido estabilidad

Estabilizar la fachada, eliminar todos los elementos externos cuya estabilidad no pueda garantizarse, consolidar la cornisa de la esquina de las calles Ezcurdia y Caridad, apuntalar todos los pisos de las zonas afectadas, vallar el perímetro y demoler todos aquellos elementos del interior que se consideren irrecuperables. Son las medidas cautelares que, de manera «inmediata», deberá acometer la congregación de las Hijas de la Caridad, propietaria del edificio del colegio de San Vicente de Paúl que en la mañana del 5 de enero sufrió un derrumbe que ocasionó la muerte a dos primos y trabajadores de la construcción, Andrés Velasco Díaz y David Velasco Velasco, que en ese momento cambiaban un techo de pladur en el inmueble.

Los técnicos municipales de la Concejalía de Urbanismo visitaron el edificio el mismo día 5 y de nuevo ayer por la mañana, acompañados de la edil del ramo, Loli Patón y el director Gonzalo Canga. La precaria situación del inmueble exige una rápida intervención, lo que explica que durante la tarde ya se enviara el informe técnico a la propiedad para que esta acometa cuanto antes los necesarios trabajos para asegurar la zona. La prioridad es estabilizar y consolidar la fachada, «teniendo en cuenta además que deberán eliminarse todos aquellos elementos cuya estabilidad no pueda garantizarse, como por ejemplo barandillas sueltas o piezas de cornisa rotas». También se deberán apear los huecos de ventanas afectados por el derrumbamiento y se ha de resolver la consolidación de la cornisa perimetral especialmente afectada, la de la esquina de las calles Ezcurdia y Caridad, que al perder todo el forjado de la cubierta ha quedado desprotegida y que además presenta dos grietas perfectamente visibles.

Una vez aseguradas estas zonas, los técnicos municipales requieren a la propiedad que apuntale «todos los pisos de abajo hacia arriba en las zonas afectadas, teniendo en cuenta la carga actual sufrida por el derrumbe». Esta actuación permitirá entrar con seguridad para realizar las obras de desescombro y cualquier otro trabajo que resulte necesario en el interior del edificio.

Asimismo, se deberá proceder al vallado perimetral de la zona afectada hasta el bordillo de las aceras colindantes a través de un cierre metálico, apoyado en piezas de hormigón. Únicamente se permitirá el paso peatonal en los edificios situados enfrente y se protegerá el cruce viario de cualquier acceso, ampliando lo máximo posible el cierre en esta zona.

Cuando se hayan ejecutado las labores de estabilización y consolidación del inmueble, según estipulan los técnicos municipales debe procederse al «desescombro y demolición de aquellos elementos del interior que hayan perdido estabilidad o que sean irrecuperables». La prioridad es asegurar el inmueble y cuando esto esté garantizado, siendo deber de los propietarios mantener los inmubeles en las debidas condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, las Hermanas de la Caridad tendrán que efectuar las obras necesarias para garantizar la reanudación de la actividad. El colegio cuenta con protección parcial y está incluido en el Catálogo Urbanístico. Por ello, la actuación a acometer tras el aseguramiento deberá contar con la autorización previa de la Comisión del Catálogo.

Según se recoge en su ficha, el edificio, con influencias del racionalismo, el art-decó y el regionalismo, es obra del arquitecto Miguel García de la Cruz, que firmó el proyecto alrededor de 1930. Sin embargo, al tratarse de un edificio de uso dotacional no está sujeto a la obligación de realizar una inspección que rige para los inmuebles de uso residencial con más de 50 años de antigüedad.

El último informe sobre el estado del edificio data de 2017 y fue elaborado por una empresa privada a instancias de la fundación Educere, que gestiona el colegio y que por aquel entonces lo presentó al Ayuntamiento al solicitar una licencia para rehabilitar la fachada. Este informe valoraba el estado de conservación del edificio, textualmente, como «favorable».