Los balcones vuelven a llenarse

Solo en Contrueces la tranquilidad de la noche se vio alterada, pero por un motivo noble. Los vecinos de la calle San Juan quisieron tener un gesto solidario con quienes no están pasando unas fiestas felices y rindieron un sentido homenaje a los fallecidos por culpa de la covid-19. «No vale estar tristes», esa fue la frase de ánimo, megáfono en mano, emitida desde uno de los balcones del vecindario. La alegría, música navideña y luces invadieron el ambiente, junto con contundentes y sentidos aplausos: «Hay que intentar ser felices». Incluso un 'doble' de Papá Noel recordó a los niños que no se olvidaran de dejar los calcetines junto al árbol de Navidad.

El tradicional brindis de Nochebuena, mermado en esta ocasión por las restricciones impuestas por el Principado y la lluvia, apenas congregó a gente en los bares y terrazas. Eso sí, durante la jornada, las compras navideñas continuaron con «ritmo alegre». Los ejes comerciales de Gijón presentaban, desde primera hora de la mañana y hasta la hora de cierre, un buen aspecto. Algo que no significó en ningún caso que se produjeran aglomeraciones.

Lo que sí hubo fue cierto caos de tráfico. Como suele ser habitual en días de lluvias, el coche colapsó las calles de la ciudad. A mediodía, en las vías de acceso al centro desde la zona este, se registraron importantes atascos. La avenida de la Costa y las calles Menéndez Pelayo, Uría y Menéndez Valdés fueron las zonas donde se registraron más retenciones. También en el barrio de La Arena hubo atascos. A las 13.30 horas, una ambulancia a duras penas pudo atravesar las calles del barrio para acceder a su punto de destino.

Ya en torno a las 21 horas, el escenario cambió y las calles comenzaron a vaciarse. Había que cenar aunque el destino y la compañía para muchos no fuera los mismos que otros años. Tres horas de tranquilidad en las calles de la ciudad que se vieron mínimamente alteradas hacia la medianoche. Hubo quienes apuraron hasta última hora para volver a casa a las 12.30 horas, que fue el toque de queda marcado por el Principado para esa jornada, al igual que para el día 31.

La Policía Local de Gijón arrestó durante el 24 de diciembre a cinco personas por delitos contra la seguridad vial. La primera detención tuvo lugar a las 19.15 horas en la calle Juan Alonso, después de que una patrulla observara a un vehículo circulando con una rueda totalmente destrozada y arrastrando parte de la estructura por el asfalto. El conductor, O. F. T., de 27 años y vecino de Gijón, hizo caso omiso a las indicaciones de los agentes y continuó su marcha. Finalmente pudo ser interceptado. Se encontraba bajo los efectos del alcohol y, además, momentos antes había chocado contra otro coche estacionado en la calle La Felguera.

Por otro lado, a las 20.40 horas, en la plaza de Los Fresnos, se produjo un accidente de tráfico en el que los dos conductores implicados resultaron estar bajo los efectos del alcohol. A. V. C., de 60 años de edad, y K. T. E., de 36, fueron detenidos por un presunto delito contra la seguridad vial.

Cinco minutos más tarde, a las 20.45 horas, el vehículo que conducía S. C. C., de 29 años y vecina de Gijón, colisionó contra otro tras invadir presuntamente el carril contrario. Cuadriplicaba la tasa máxima de alcohol permitida. La mujer fue detenida. Finalmente, a las 22.10 horas tuvo lugar otro accidente en el entronque de las calles Juan Alvargonzález y Leoncio Suárez. T. M. T., de 28 años, no habría respetado un ceda el paso, colisionando con otro vehículo que circulaba con prioridad. También cuadriplicaba la tasa máxima permitida de alcohol en aire espirado,

Por último, 21 personas incumplieron el toque de queda y fueron denunciadas cuatro fiestas.