«Con el carril bici no había ningún problema», dicen los vecinos de Poniente

El reciente inicio de las obras para desviar el carril bici que discurre frente a los edificios barco de Poniente para trasladarlo hacia la calle de Mariano Pola ha cogido por sorpresa a los vecinos de la zona porque «con el carril bici no había ningún problema. Sí en el entorno de Fomento, pero no en esta zona», explica Emilio Rodríguez Rico, presidente de la Asociación de Vecinos Pando, de Poniente.

Explica que se trata de una obra que «no solicitó nadie y es un carril que no va a ninguna parte», ya que termina en la plaza de Máximo González. Eso sí, esta infraestructura puede encontrarse con algún problema. Emilio Rodríguez apunta que al pasar por Mariano Pola «son 200 metros de calle y hay siete salidas de garaje y una de un aparcamiento. Y pasa el carril por delante de todas ellas. Lo único que consiguen en que las bicicletas no pasen por delante de los edificios barco».

También están disgustados los vecinos porque el concejal de Movilidad y Medio Ambiente, Aurelio Martín, «vino con hechos consumados. ¿Qué vamos a decir? ¿Qué más da que estemos o no de acuerdo?», se lamenta Rodríguez, quien asegura que «no pintamos nada».

La maquinaria comenzó a cortar anteayer el césped frente al edificio Arión para construir un nuevo carril bici que «no hace falta», dice el presidente vecinal, que apunta que se perderán una veintena de aparcamientos y que tratarán de recuperar alguno en la explanada frente al Acuario. En su opinión, esta actuación no ha sido bien concedida por los responsables municipales: «Cuando se hace una obra, hay que estudiarla mejor», remarca Emilio Rodríguez.