La educación, en lucha

No se juntaron en ningún momento, pero la unión, aunque a distancia, hizo la fuerza. Resultó que los dos grupos «llegaron por Manuel Llaneza y la avenida de Pablo Iglesias hasta la Inspección del MEC en Gijón», después de varios minutos generando un considerable atasco en la ciudad. «Sin embargo, tampoco en este punto hubo una unión», dijo EL COMERCIO. «Creo que pedimos cosas diferentes», señalaba la representante del APA del Antonio Machado. No, ciertamente: mientras que el Machado luchaba por implementar la jornada continua, los otros colegios exigían que se enviasen los profesores requeridos por los centros, cuyas plantillas docentes no estaban completas en el momento de arrancar el curso iba ya para un mes atrás.

Y la cosa no acabaría ahí. Más de 300 firmas se habían recopilado ya en el caso del Machado para la concesión de la jornada continua, y, además, varios padres permanecían encerrados en las dependencias del centro. «El horario partido provoca un descenso en la matriculación», explicaba una representante de la APA en cuestión. Por su parte, aunque el alumnado de Los Campos ya habían conseguido tutora para el curso de tres años, volverían a la calle junto a Elisburu y Río Piles «para cortar el tráfico en la zona [de la Inspección del MEC y después protagonizar una manifestación hasta la plaza Mayor». Los derechos, también los de los más pequeños, se consiguen luchándolos.