Un informe municipal precisa que la obra del Muro es legal siempre que sea provisional

Una obra de carácter provisional, ajustada a la normativa vigente, que no modifica elementos esenciales de la actual configuración del paseo y que resulta fácilmente reversible. Esa es la descripción trazada por los técnicos municipales respecto a los trabajos de peatonalización en el Muro, justificados en base a la adaptación del entorno para favorecer así el distanciamiento social exigido a raíz de la pandemia. El documento, elaborado a petición de Cs, PP y Foro, trata de clarificar si los trabajos responden a los planes vigentes y gozan de espacio legal. En él, los técnicos fijan la clave en torno al concepto de provisionalidad, sobre el que ha insistido en repetidas ocasiones el gobierno local y el cual avalan los estudios. Es decir, la obra es lícita siempre y cuando se lleve a cabo obedeciendo a «una necesidad coyuntural» y a una situación «muy específica», como puede ser el cumplimiento de la normativa sanitaria vigente.

No obstante, al margen de lo anterior, el informe deja la puerta abierta a que la Corporación -los 27 concejales que conforman el Pleno- introduzca modificaciones en los trabajos, entre las que se encuentra la revocación de la obra.

«El carácter provisional implica que una medida puede ser modificada en cualquier momento a través de una decisión de la Corporación», explican los técnicos en el tercer apartado de conclusiones.

Pese a que esta última aseveración resulta un poco ambigua en forma y contenido, varios grupos de la oposición ya trabajan para que la obra del Muro sea votada por el Pleno, extremo que no se ha producido todavía. «Estamos estudiando activar esta opción una vez se nos facilite el acceso al expediente y contemos con toda la información, y conozcamos si realmente esta obra fue concebida como una actuación provisional y por cuánto tiempo, y no como algo con vocación de permanencia», explicaba ayer el concejal de Ciudadanos Rubén Pérez Carcedo. La formación naranja mantiene, tal y como refrenda el informe, que de no ser provisional la obra del Muro no se ajustaría a la normativa fijada en el Plan Especial del Muro. Dicho esto, duda de las intenciones del gobierno local respecto a estos trabajos y su posible vigencia.

«No parece razonable que se hayan gastado más de 200.000 euros en una obra provisional que se concluirá en septiembre, una vez que ya ha pasado el periodo de mayor afluencia en el Muro, y que se ha realizado sin un estudio de impacto, de forma improvisada y sin dialogo ni participación», critica.

También el PP ponía ayer en tela de juicio las intenciones del ejecutivo liderado por Ana González. «Estamos siempre jugando con maniobras de la confusión. Para una medida provisional no te gastas más de 200.000 euros», insistía su portavoz, Alberto López-Asenjo, cuyo grupo preguntará en la próxima comisión de Urbanismo si se ha modificado el artículo 97 del Plan General de Ordenación Urbana, sobre cuyo cumplimiento existen diversas dudas en la Corporación.

Por su parte, la plataforma StopMuro cargaba ayer contra la actitud del concejal de Mantenimiento y Obras Públicas, Olmo Ron, en su respuesta a las críticas por la peatonalizaicón de la avenida de El Molinón. «Ha quedado claro el caracter totalitario del citado concejal, más propio de un régimen stalinista o fascista. Lo único que han hecho es crear problemas de movilidad donde no los había», afirma.