El tabaco y el dolor de espalda

Todos sabemos que el tabaco no es sano, y que puede producir cáncer u otras enfermedades crónicas. Sin embargo, muy pocos conocen que fumar también perjudica gravemente la salud de la columna vertebral.

En España, alrededor de 8,6 millones de personas son fumadores activos, adicción que provoca dolores de espalda en al menos el 31% de ellos.

Como bien lo explican el neurocirujano especialista en patologías complejas de columna, Kelvin Piña y la enfermera responsable de la Unidad de Tabaquismo del área IV de Oviedo, Raquel García, los fumadores no asocian el consumo de tabaco a patologías complejas de columna, pero la evidencia científica ha demostrado que los dolores de espalda son mucho más fuertes y frecuentes en quienes fuman que en quienes no lo hacen. Esto se debe de manera importante a la nicotina, pues esta, reduce el suministro de oxígeno y nutrientes necesarios para un buen funcionamiento de los discos intervertebrales, lo que supone un factor de riesgo para padecer fracturas vertebrales, osteoporosis, limitaciones físicas importantes, adormecimiento, dolor lumbar o incluso hormigueo en las piernas.

Así mismo, aquellas personas fumadoras, sufren también una deshidratación precoz de los discos intervertebrales, lo que conlleva a discopatías y, posteriormente, dolores o incluso hernias discales.

A nivel quirúrgico, los fumadores corren un riesgo superior de complicaciones tanto quirúrgicas como postquirúrgicas, como cicatrización lenta y mayor posibilidad de infecciones pues el consumo del tabaco lleva a una alteración en los procesos de cicatrización, en los que intervienen la nicotina, el monóxido de carbono y el cianuro de hidrógeno.

Una cicatrización alterada, conduce a un aumento de complicaciones postquirúrgicas como cicatrices menos estéticas, hipertróficas, apertura de suturas o pérdida de pelo en la cicatriz, entre otros.

El riesgo es mayor a mayor número de cigarrillos fumados. Por ello, es importante suspender su consumo antes y después de las cirugías. Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), demuestra que, tras 4 semanas, cada semana sin fumar, mejora los resultados sanitarios en un 19%, gracias a que se favorece la circulación sanguínea por todo el organismo hacia los órganos esenciales. Por ello, es recomendable contar con la ayuda de profesionales especializados en el abandono de tabaco para duplicar las posibilidades de éxito, ya bien sea en el Centro de Salud, en Unidades Especializadas de Tabaquismo o en su Farmacia Comunitaria.

Sin duda, es vital tanto para nuestra columna vertebral como para nuestro bienestar general, mantener un estilo de vida saludable. Evitar tóxicos como el tabaco, hacer ejercicio regularmente, mantener una alimentación saludable y controlar el estrés son las piezas clave para disfrutar de un bienestar físico y mental.