Cada asturiano se juega al Niño más de 26 euros

Es muy diferente al sorteo de Navidad. No solo por la forma, también por cómo se compra, porque el Niño es otra ilusión diferente, otra forma de jugar. El mismo día que los Reyes Magos llegan cargados de millones, Madrid acoge otro de esos sorteos tradicionales que tienen a media España pendiente de qué pasará, de adónde viajará la lluvia de millones. Pero aquí las ventas se acortan en el tiempo, son unos 15 días frente a los seis meses que hay para comprar los décimos en busca del Gordo de Navidad, y ya no son tan corporativas, tan de equipo, de familia, de grupo, de amigos. Son más individuales. Ha ido bien la venta, o eso al menos constatan en las administraciones asturianas. Son 26,52 euros la cantidad asignada por barba en Asturias, lo cual no quiere decir que sea ese el gasto real de los asturianos de media en el sorteo, puesto que es preciso descontar las devoluciones, que siempre se producen. Raro sería que se agotara todo el papel. Ha crecido la cifra asignada respecto año pasado, que fue de 25,84 euros.

Es, en todo caso, y como suele ser habitual, una cifra alta en el contexto de una España que de media se suele jugar menos. 17,50 euros es el gasto de cada español, por encima del pasado ejercicio, que se situó en 15,26. Por regiones, la comunidad autónoma que previsiblemente más se gasta por habitante este año es Castilla y León, con una media de 27,63 euros, seguida de Asturias (26,52 euros), Comunidad Valenciana (24,84 euros), País Vasco (22,43 euros), Murcia (22,07), La Rioja (21,17 euros), Cantabria (20,88 euros), Aragón (20,70) y Castilla-La Mancha (19,17 euros).

Para Borja Muñiz, del Búho de la Suerte, en Gijón, la venta ha ido bien, pero tampoco está la cosa como para tirar voladores. Es un gran defensor de este sorteo y lamenta que el público no sea tan fan de él como del de Navidad. La venta del Niño depende un poco de los resultados del día 22. «Va a un ritmo adecuado, el ritmo normal de la lotería del Niño, que pierde mucho tirón respecto a la lotería de Navidad», señala. Y añade que este es un sorteo muy interesante en cuanto a premios. «La gente tiene una idea equivocada, es un gran sorteo, da muchos más premios, hay más posibilidades de que te toque en el Niño que en otro sorteo». La administración El Carbayón, de la calle de Valentín Masip de Oviedo, que el día 22 dio un cuarto premio, vendió 10 décimos, lo que se tradujo en 200.000 euros. Y aunque no sea una cifra muy abultada, el premio siempre anima a los compradores. «Se notó un aumento en las ventas, yo creo que la gente está contenta porque tocó, se ve que va saliendo de la pandemia y tiene que mantener la ilusión», anota Dolores Moraño, que advierte las particularidades de este sorteo: «Siempre se espera a terminar el de Navidad para comprar, pero se compra con otra ilusión, no es cambiar con el tío, con los amigos, es más a nivel personal», señala. Salvo que haya tocado algo en lo compartido en Navidad, que entonces la norma habitual manda a reinvertir para volver a tentar a la suerte. «Por aquí se está pasando mucha gente».

En la administración número 9 de Avilés dieron la pasada Navidad el premio más generoso de los que llegó a Asturias, un quinto con 3,6 millones de euros, y está claro que el dinero llama a dinero. «La verdad es que hemos tenido más gente de la que esperábamos», señala Rosa García, quien relata que por su administración han pasado personas de muchos sitios de Asturias para adquirir décimos. Para ella, este sorteo es muy especial, es un juego a reasignar ganancias y afrontar el nuevo curso con ilusión. «Es un sorteo diferente, yo pensé que no se compraba tanto», resume. Y no duda: «Esperamos repetir, sí, por supuesto, y sin tardar».