¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO
Gaspar Meana

«Yo soy yo y mis algoritmos»

Es importante que en la Unión Europea contemos con nuestras propias tecnologías de Inteligencia Artificial para competir con EE UU y China. Se podrían desarrollar en las universidades, con capital público y privado

Miércoles, 6 de agosto 2025, 21:12

Es la frase de una viñeta del equipo de humoristas gráficos, Idígoras y Pachi. Me hizo mucha gracia y la tomo prestada como título. Describe ... muy bien lo que somos en los tiempos actuales. La expresión, como saben, está inspirada en la enunciada por Ortega y Gasset: «Yo soy yo y mi circunstancia». El filósofo quería decir que somos esencialmente circunstanciales, por lo que deberíamos concienciarnos de que los valores hieráticos que dictan perspectivas eternas ya no son efectivos. Comentaba también Ortega, que «junto a la circunstancia y la perspectiva aparece otra realidad insalvable: el yo». La circunstancia por sí sola no es nada, sino que adquiere radicalidad cuando la emparentamos con el sujeto que la vive, porque es quien trabaja y elabora en ella su vida y su proyecto humano, de ahí, que «si no la salvo a ella no me salvo yo». En 'Perspectiva y verdad' se preguntaba: ¿Por qué asumo mi posición en el mundo, mi circunstancia, y, sobre todo, mi punto de vista como conjunto que me acerca a la verdad? Pues porque «vivir en el mundo es convivir con las circunstancias», pero siendo yo. Viene a colación todo lo anterior, no porque quiera soltarles un ampuloso discurso sobre la filosofía de Ortega, sino por la relación que guardan estas reflexiones orteguianas con las circunstancias por las que atraviesa actualmente la Unión Europea (UE), con respecto al nuevo orden geoestratégico global en lo que respecta a la carrera por el dominio de la Inteligencia Artificial (IA).

Publicidad

En palabras de la la presidenta de la Comisión, Úrsula von der Leyen: «Deseamos ser uno de los líderes en este sector innovador y adoptaremos un modo de vida en que la IA tenga una mayor relevancia», para lo cual anunció una inversión de 200.000 millones (¡Cáspita!, con otros 800.000 millones para el rearme, no sé cómo se financiarán). Por lo que podemos decir sin temor a equivocarnos que la UE es la UE y sus algoritmos y también sus armas (parafraseando a Idígoras y Pachi) y tiene que salvar los algoritmos y las armas para salvar la UE, de lo contrario nos comerán la tostada los estadounidenses, los chinos y los rusos.

En los próximos años la vieja Europa va a tener que competir en varios frentes, no solo en defensa, sino también con el denominado plan Stargate de Trump, que va a hacer inversiones millonarias para que su modelo de IA sea la hegemónica. De igual modo, con la IA desarrollada recientemente por los chinos, que a finales del pasado mes de enero irrumpió en escena con DeepSeek, más barata, gratuita, de código abierto, tiene más rapidez, es más personalizable y por consiguiente, muy competitiva. Según fuentes consultadas, DeepSeek «se entrenó con 5,6 millones de dólares y 2048 chips H800 de Nvidia que es una versión de menor potencia que el H100s, el empleado por los estadounidenses, que requiere de una mastodóntica arquitectura». De hecho, la empresa fabricante de chips con sede en California sufrió, en su día, una caída importante en la bolsa y arrastró a pérdidas a los gigantes tecnológicos estadounidenses: Google, Microsoft, Amazon y Meta (WhatsApp y Facebook). Ahora bien, la pregunta que nos podemos hacer es: ¿el modelo de IA europeo, al igual que los otros, aparte de recopilar datos con propósitos comerciales y hacer labores de espía para controlar a los usuarios, se someterá a regulación para que se aplique de manera ética y segura? Es aquí donde deben entrar los cimientos de nuestra identidad europea (el yo de Ortega), que es la defensa de nuestros valores éticos, que como decía Alba Rico, «nombramos en las grandes crisis y traicionamos en las rutinas de gobierno».

China tiene una forma de gobierno autoritaria y utilizará la IA para controlar más a la población mediante su poder omnividente y su sistema de crédito social. Algo parecido puede suceder en Estados Unidos con la Administración Trump, que eliminó a los verificadores de contenidos de las redes sociales, apelando a la libertad de expresión como tapujo, pero lo que realmente pretenden es contar con impunidad, ausencia de regulación y poder saturar las redes con contenidos falsos que les permitan manejar a unos consumidores incautos que podrán ser fácilmente manipulables. Estas son las circunstancias con las que tiene que lidiar la UE. Pero, como decía al principio del artículo, las circunstancias por sí solas no son nada, sino que adquieren radicalidad cuando la emparentamos con lo que somos los europeos, o al menos con lo que decimos ser. Por eso, es tan importante que contemos con nuestras propias tecnologías de IA. Se podrían desarrollar en las universidades con capital público y privado. De hecho, Europa controla un recurso clave: las máquinas de litografía ultravioleta para producir los chips que se necesitan, fabricados por la empresa holandesa ASML.

Publicidad

La IA europea debe estar vertebrada por nuestros valores éticos, que no debemos cancelar debido a las circunstancias adversas, sino reafirmarnos en ellos. Debemos seguir siendo democracias con principios y normas, frente al autoritarismo que viene que pretende prescindir de ellas. Hace tiempo dijo Óscar López, ministro de Transformación Digital, «frente al modelo norteamericano y el chino puede haber una tercera vía, la europea, que combine innovación con los derechos humanos». Los europeos creemos que nadie conoce mejor que nosotros mismos nuestra identidad, nuestros pensamientos y deseos, pero en eso llegaron los algoritmos de las IAs, que nos conocen mejor que nosotros mismos y saben todo sobre nosotros. En definitiva, «yo soy yo y mis algoritmos» y si buscamos el bienestar de nuestras sociedades el debate ético más urgente es la asunción de responsabilidades por parte de los que nos venden las IAs, pero también del uso que hagamos los usuarios que las utilizamos y las regulaciones que establezcamos al respecto sobre ellas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

1 año por solo 16€

Publicidad