El Desarme aspira a ser Fiesta de Interés Turístico Nacional «en cinco años»

Los garbanzos con bacalao y espinacas, los callos y el arroz con leche no tienen la capacidad de vencer al virus, pero sí de calentar el cuerpo, proporcionar fuerzas para encarar el otoño y, de paso, insuflar un poco de energía a la hostelería en tiempos de pandemia. Las jornadas del Desarme, en tiempo de mascarillas y aforos reducidos, arrancará el próximo día 15 y rememorarán los escarnios de isabelinos y carlistas en la Vetusta del siglo XIX. Así lo presentaron ayer, en el restaurante De Labra, el presidente de Otea, José Luis Álvarez Almeida; y el cofrade mayor del Desarme, Miguel Ángel de Dios. En palabras del cofrade, el Desarme, que en 2019 se convirtió en Fiesta de Interés Turístico Regional, aspira a convertirse en nacional «en cinco años». «Ya hemos comenzado a trabajar en ello». Pero ahora, el menú llega «con baterías renovadas», explicó y «con las máximas garantías de seguridad».

Almeida aseguró que ahora más que nunca «necesitamos a todos los cofrades», «a toda la hostelería», porque, en sus palabras, «sabemos que estamos en riesgo, pero saliendo a comer el Desarme ayudamos al sector», dijo.

La viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, alabó las virtudes de un sector que ha pilotado el «éxito turístico de Asturias», al tiempo que advirtió que «más pronto que tarde podremos celebrar el Desarme de siempre».

El alcalde, Alfredo Canteli, afirmó que «la hostelería está siendo uno de los sectores más castigados». Por eso, dio gracias por el «cumplimiento escrupuloso» de las normas. «Es el único camino para que siga siendo un motor económico», concluyó.

En el transcurso de la presentación, el alcalde entregó las placas de Embajador de la Cofradía del Desarme a los restaurantes incorporados a la entidad: L'Ayalga, El Marmío, La Paloma, El llar de la Catedral, El Tizón, La Cava de Floro y El Nalón.

Como novedades, este año se instaurarán los Bocados del Desarme, entre los días 9 y 19 de octubre, para todos aquellos establecimientos que no participen en el menú; y Trascorrales acogerá una exposición histórica.