Las peatonalizaciones y la Zona de Bajas Emisiones reducirán el ruido
La racionalización de la movilidad traerá consigo mejoras ambientales, económicas y de calidad de vida, concluyen los redactores del texto
Durante los próximos cuatro meses, el Ayuntamiento cambiará la cara a las calles Ramón y Cajal, Pozos y Mendizábal, sometidas en este tiempo a un ... proceso de peatonalización con el objetivo claro de que sean los vecinos a pie los que cobren el protagonismo y no el tráfico. En el futuro, aunque aún sin fecha, el gobierno local espera hacer lo mismo con las calles Rosal y Martínez Marina. El proyecto en marcha se culminará gracias a una inversión de millón y medio de euros, pero no es el único ideado para que el peatón le vaya ganando cada vez más espacio al coche privado en la geografía urbana. Antes del próximo verano deberá estar en marcha la nueva Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad, que cerrará el centro y El Antiguo al tráfico más contaminante por otra decena de millones de euros (la gran mayoría provienen de los fondos europeos).
Dos actuaciones a las que aún se puede sumar el proyecto del PP de Canteli de cerrar al tráfico el entorno de la plaza de la Escandalera, uniéndola de forma peatonal la calle Uría y el paseo de los Álamos en junio de 2025, y que, tal y como recoge el nuevo Plan de Acción contra el Ruido del Ayuntamiento, no sólo avanzarán hacia una movilidad sostenible, sino que reducirán la contaminación acústica a la que están sometidos los ovetenses. No en vano, «el principal foco de ruido desde el punto de vista de personas afectadas es el tráfico rodado», concluye el documento.
Los redactores sostienen que desde la aprobación del plan anterior, en marzo de 2021, la ciudad ha ido dando pasos en la buena dirección para lograr que la dinámica disminución de la contaminación acústica se perpetúe en el tiempo de la misma manera que ha venido haciéndolo a lo largo de la última década. Pasos como la constitución de una mesa municipal del ruido, los citados proyectos de peatonalizaciones y la ZBE, la promoción de la movilidad compartida, la realización del plan Oviedo 30, o el fomento del uso de la bicicleta y del coche electrico, entre otras que se están llevando a cabo.
Más calidad de vida
«Consciente de este problema, el Ayuntamiento ha puesto un gran número de recursos destinados a la mejora de la gestión de la movilidad, que contribuirán a una racionalización y mejora paulatina de esta en la ciudad de Oviedo, mejorando por lo tanto todas las consecuencias que trae consigo, desde el punto de vista medioambiental (ruido incluido), económico y de calidad de vida», destacan.
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