La poza del Nalón donde falleció un joven, un lugar peligroso tocado por la muerte

Asturias llora a la primera persona que ha muerto ahogada en lo que va de verano. Se trata de un joven de 18 años que falleció durante la tarde del miércoles en el río Nalón muy cerca del puente colgante de Las Caldas, una zona en la que es común encontrar decenas de bañistas, pese a su peligrosidad por la cantidad de agua que lleva y por los comunes remolinos. Se da la circunstancia de que en el momento del suceso el río estaba «muy turbio», según confirman fuentes de la investigación, de la que se ha hecho cargo del equipo de la Policía Judicial de la Comandancia de Oviedo. En mayo de 2020, un vecino de La Florida de 19 años perdió la vida ahogado en la poza del Nalón, muy cerca del lugar del que sacaron esta tarde el cuerpo del joven cubano, en mitad de una tarde de baño con amigos.

La desaparición del joven cubano se produjo en la margen derecha del río, en una zona que puede alcanzar los seis metros de profundidad que los vecinos califican como muy peligrosa y en la que ya han solicitado que se prohíba el baño. El padre del joven se encontraba a unos metros cuando se percató de que su hijo estaba haciendo gestos con la mano en señal de auxilio. En principio creyó que pudiese tratarse de una broma, pero enseguida se dio cuenta de lo contrario y se lanzó a por él junto a un primo de este adolescente. No lograron llegar y lo perdieron de vista cuando se encontraban cerca de él. Sus familiares se tiraron al agua al rescate, pero no les dio tiempo a llegar a él.

Tras la desaparición comenzó una tensa búsqueda que se alargó durante tres horas y cinco minutos de angustia hasta que los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Benemérita rescataron el cadáver del fondo del río. Estaba atrapado a cien metros del puente colgante, Nalón arriba, a escasos nueve metros de la orilla.

El COS de la Guardia Civil recibió las primeras a las 17.25 horas alertando de lo sucedido y enseguida se movilizó al helicóptero, al Grupo de Rescate de Montaña (Greim) de Mieres y al GEAS, así como varias patrullas. El operativo de emergencias lo completaron los bomberos, numerosas unidades de la Policía Local y medios del SAMU. Posteriormente también se unió al operativo la Policía Nacional. Fue a las 20.30 horas cuando los buzos localizaron el cuerpo sin vida del joven. Luego llegarían los efectivos del equipo de Policía Judicial del Instituto Armado, la autoridad judicial y el médico forense para el levantamiento del cadáver.

Durante las largas tres horas que se prolongó el operativo de búsqueda, un angustiado padre esperaba novedades desde la orilla. A la madre del fallecido y a sus dos hermanas las habían evacuado previamente y el 112 también puso a disposición un equipo de atención psicológica. Cinco minutos antes de sacar el cuerpo sin vida del joven del río, también se llevaron a su progenitor. La familia, de origen cubano, reside en la capital asturiana.

A la zona acudió también el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento, José Ramón Prado, para asistir a las tareas de búsqueda de primera mano. En el lugar se había comenzado a aglomerar una gran cantidad de gente. Durante la tarde, numerosas personas habían ido a las playas del Nalón a bañarse, niños incluidos.

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