Alerta de la OCU: esto es lo que esconden los productos de carne que se venden como «extratiernos» o «muy jugosos»

«Escalopín de lomo extratierno», «Cerdo muy jugoso», «pechuga fileteada súper tierna». Son algunos de los etiquetados que se encuentran en la sección de productos cárnicos del supermercado. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte que lo que este tipo de etiquetados esconden es la adición de agua, aditivos y aromas.

La mayoría de los productos cárnicos con alegaciones relativas a su jugosidad o su terneza son adobos, marinados, preparados al ajillo o con finas hierbas de cerdo o de ave. Pero también los hay de filetes sin preparación, aparentemente sin aditivos. Todos ellos incorporan agua añadida que se retiene infiltrada mediante el uso de sal, azúcar, fibra vegetal y estabilizantes. Además, llevan otros aditivos, como los conservantes, los antioxidantes y los potenciadores del sabor, algunos de ellos poco recomendables. Es el caso del nitrito sódico (E-250), los trifosfatos (E-451) o el glutamato (E-621), señalan desde la OCU.

Es por ello que el organismo de consumidores consideran que estos preparados de carne deberían comercializarse separados de la carne fresca ya que son productos muy diferentes según el propio Reglamento Europeo de Productos Cárnicos, igual que lo son los fiambres. Es más, debería adaptarse la normativa para que este tipo de preparados destacaran en el frontal del envase que se trata de un «Producto con agua añadida», sea cual sea la cantidad, de modo que el consumidor advierta que no se trata de carne fresca 100%, una opción siempre más saludable

La OCU considera que estos preparados de carne deberían comercializarse separados de la carne fresca (sin aditivos), ya que son productos muy diferentes según el propio Reglamento Europeo de Productos Cárnicos, igual que lo son los fiambres y que debería adaptarse la normativa para que este tipo de preparados destacaran en el frontal del envase que se trata de un «producto con agua añadida», sea cual sea la cantidad, de modo que el consumidor advierta que no se trata de carne fresca 100%, una opción siempre más saludable.

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