Alimentos que son fuente de vitaminas, minerales, fibra, agua imprescindibles en vacaciones

La importancia de la fruta en verano es mayor de la que se piensa por el gran aporte de agua, además de vitaminas y minerales, que proporciona a nuestro organismo y que nos ayudan a protegernos de las altas temperaturas.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), deberíamos consumir en torno a los 400 gramos de frutas y verduras al día para combatir la obesidad y otras enfermedades no transmisibles. Sin embargo, el consumo de frutas y verduras de la población mundial se encuentra muy por debajo de esta recomendación.

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, a través de su estrategia NAOS, lanzó a principios de año una nueva campaña dirigida al fomento de la alimentación saludable, sobre todo enfocada en el problema que supone la obesidad infantil.

Bajo el lema de «Pon más héroes en tu plato y llena tu vida de superpoderes» se trata de influir precisamente en mejorar los hábitos alimenticios de los más pequeños incrementando el consumo de frutas, verduras y legumbres.

El porcentaje de menores que cumplen las recomendaciones de consumo diario de frutas y verduras no llega si quiera al 2'5%, algo muy preocupante, aunque es verdad que el consumo de fruta en los hogares españoles creció un 10% en 2020 con respecto al año, anterior pero aún no ha llegado a las cifras recomendadas por los distintos organismos expertos en salud y prevención.

Tomar fruta habitualmente supone disponer de una de las mayores fuentes de vitaminas, minerales, fibra y agua para nuestro organismo. Su consumo nos nutre de antioxidantes y micronutrientes, aportando mucha energía sin suponer un aporte calórico elevado y contribuye a que se mantenga una dieta equilibrada.

La OMS habla de entre 2-3 raciones de verdura al día y 3-4 raciones de fruta para mantener una alimentación sana y equilibrada, siempre teniendo en cuenta que una ración ronda entre los 120 y los 200 gramos.

Para la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, una forma sencilla de distribuir estas raciones diarias recomendadas es repartiéndolas entre las 5 comidas diarias que los médicos siempre recomiendan a la población en general y sobre todo a la población infantil.

Y a pesar de que vivimos en uno de los países europeos en los que más cantidad y diversidad de frutas se producen, solo un 10'9% de la población afirma que diariamente come esas cinco raciones de frutas y verduras, según los datos que manejan en la Oficina Europea de Estadística (Eurostat).

Estamos por debajo de la media de la Unión Europea que está en torno al 12% y muy lejos de países como Irlanda donde el 33% de la población reconoce que cumple con esa recomendación de organismos como la OMS y la FAO.

Lo mejor siempre, según recomiendan médicos y nutricionistas, es tomar la fruta entera, siempre con su pulpa y que esta sea de temporada para poder recoger todos los beneficios que nos aporta incluida su fibra.

La naranja es la fruta más consumida en nuestro país seguida por la manzana, el plátano y la sandía. Precisamente es el plátano la fruta que más éxito tiene entre la población asturiana a lo largo de todo el año y la que se convierte en la fruta estrella del verano, por méritos propios, es la sandía.

Los datos que maneja el sector es que cada año en España se consume en torno a los ocho kilos de sandías por persona, aunque es cierto que este año la producción de sandía ha descendido en parte por las condiciones meteorológicas tan adversas que hemos vivido y seguimos viviendo estos meses de calor.

Noelia Suárez, directora de comunicación de Nutritienda, señala que «la sandía es una de las frutas más recomendadas para nuestra salud ya que es fuente de vitaminas y minerales y por eso animamos a su consumo aunque su precio haya subido esta temporada».

Las ensaladas de frutas en verano son un postre, una merienda o incluso pueden formar parte de un desayuno tan equilibrado como saludable y delicioso.

Un 95% de la composición de la sandía es agua, lo que ayuda a mantener la hidratación del cuerpo en los días más calurosos del año, el plátano añade potasio a la dieta, las fresas o fresones vitamina C, y si a estas o al resto de frutas de temporadas, les añadimos unas cucharadas de yogur o de kéfir, podemos preparar un plato sencillo pero muy completo, cargado de energía, saludable y refrescante. Hay para cambiar de receta casi cada día durante toda la temporada.

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