El Sporting de Gijón echa a andar con dos caras nuevas y el apoyo del público

El contador del Sporting de Gijón ya está a cero. El equipor de Asier Garitano saltó esta mañana al campo número uno de Mareo para comenzar con el trabajo de pretemporada en una sesión, al igual que la de mañana (10 horas), abierta al público. Lo hace el plantel con dos caras nuevas, las de Perrin y Corredera, y la continuidad de dos de sus mejores futbolistas de la pasada campaña, Dubasin y Gelabert, así como Jordy Caicedo.

El equipo tuvo un recibimiento muy especial. Cientos de aficionados se acercaron hasta las instalaciones de Mareo para ver de cerca a los futbolistas, muy aplaudidos a su llegada al campo. Además, los niños que participan en el Campus de Mareo les hicieron un pasillo, para posar después con la plantilla.

El club está a la espera de poder incorporar al trabajo a Juan Córdoba y Pablo Vázquez, los nuevos fichajes rojiblancos. La sesión de entrenamiento comenzó con ejercicios de cierta intensidad, siempre con contacto con el balón. Una de las buenas noticias es ver a Bernal trabajando al mismo ritmo de sus compañeros al inicio de la sesión después de su grave lesión, de la que aún se recupera. La lista de futbolistas en este primer entrenamiento la componen 29 nombres. Son Yáñez, Guille, Pablo, Nacho Martín, Gaspar, Bernal, Queipo, Christian Joel, Otero, Kevin, Diego, Curbelo, Oyón, Dubasin, Gelabert, Caicedo, Corredera, Kembo, Lucas Perrin, Venteo, Iker Martínez, Mbemba, Amadou, Aarón, Manu Rodríguez, Carlos Hernández, Mancha, Lozano y Enol Prendes.

La sesión de entrenamiento se desarrolló bajo la premisa de la intensidad. Los jugadores realizaron diferentes ejercicios, y a Asier Garitano se le vio especialmente activo en el de posesión de balón en grupos reducidos. «Movimiento, no estoy parado. Aprieta, aprieta», lanzaba desde el campo. Mientras, en la grada, los aficionados se fijaban en las evoluciones de los futbolistas, con especial atención a nombres como Dubasin, Gelabert y Caicedo. También a los dos nuevos, Perrin y Corredera, muy activos en esta primera sesión.

Desde uno de los banquillos del campo David Guerra, presidente ejecutivo del club, e Israel Villaseñor, director de Gestión Deportiva, seguían atentos la sesión. A ambos les queda aún trabajo para cerrar una plantilla a la que aún deben llegar efectivos.

Al término de la sesión los futbolistas se pararon a firmar autógrafos. Los aficionados se agolpaban para conseguir acercarse a los futbolistas, que estuvieron un buen rato atendiendo las peticiones. Mientras, en las instalaciones interiores de Mareo, estaba Carlos Rivera, nuevo responsable de los servicios médicos del club, que lleva en Gijón desde el miércoles.

Un detalle que dejó el entrenamiento fue la charla que Asier Garitano mantuvo con Dani Queipo al término de la sesión. El preparador estuvo varios minutos charlando con el atacante mientras sus compañeros se acercaban ya a los aficionados.

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