Los maquinistas asturianos aplauden la garantía pero reconocen «complicaciones»
R. M.
Jueves, 14 de junio 2018, 11:06
Los cambios significativos de velocidad están ya protegidos con tres elementos. Antes de llegar a él, un cartel redondo previene al maquinista de la distancia que le queda; luego el romboidal marca el inicio del tramo. Si todo falla, la baliza detecta la velocidad del convoy y lo para. En algunos lugares el esquema se completa con un cartel rectangular que informa del final del tramo.
Los maquinistas consultados aplauden que el Adif aumente la seguridad en estos lugares, sin embargo hay quien matiza su valoración. «Las balizas instaladas son las del sistema ASFA convencional, que es más rígido que el ASFA digital que llevamos embarcado», explica uno de los miembros de la residencia asturiana. Los profesionales explican que los equipos colocados en la vía sólo pueden configurarse con dos rangos de velocidad para servicios tipo Alvia: con un límite de 60 kilómetros por hora o con 100. Esto obliga en ocasiones a los maquinistas a reducir aún más de lo indicado: «Antes de entrar en Oviedo por ejemplo encuentras la señal adelantada que avisa de que en breve entras en Llamaquique y ahí vas a estar limitado a 70; pues bien, yo a ese punto en realidad debo llegar a 60 para que no me pare la máquina. Una vez superada la baliza ya puedo liberar el control y aumentar a 70 como dice la señal».
Los trenes de mercancías son los más penalizados por una insuficiente compatibilidad que no existiría con balizas de ASFA digital, indican los consultados.