Un encierro inicia las acciones de Pedagogía contra los numerus clausus
La Asamblea de Estudiantes de la facultad programa movilizaciones para «dar visibilidad a la imposición de un atropello»
E. MONTES
Sábado, 25 de abril 2015, 00:52
El encierro duró poco, apenas una noche, pero la Asamblea de Estudiantes de Educación promete que ha sido solo el inicio de una campaña de movilizaciones destinada a «dar visibilidad a la imposición de un atropello con la implantación de numerus clausus en Pedagogía». Se refieren los estudiantes al centenar de alumnos, como máximo, que podrán matricularse en el único grado que quedaba por tener límite de acceso en la Facultad de Formación del Profesorado y Educación. Los numerus clausus, después de meses de negociaciones entre el Vicerrectorado de Estudiantes y la facultad, fueron aprobados por la Junta de Gobierno de la Universidad de Oviedo en una reunión que duró cinco minutos y en la que nadie cuestionó el recorte en el acceso a ninguna de las tres titulaciones del próximo curso.
Pero los estudiantes tachan la decisión de «caciquil», porque «el establecimiento de numerus clausus tiene que ser aprobado por Junta de Facultad y al menos en la nuestra, este tema no se trató. Tuvimos que enterarnos, no sólo nosotros, sino toda la comunidad educativa, por el periódico». Cuentan los alumnos que «no se llevó a Junta de Facultad porque no habrían salido aprobados. Ya se debatió en otras ocasiones y el recorte en el acceso nunca tuvo el respaldo de los miembros de la Junta, hasta el punto de que el decano aseguró que no volvía a llevar el asunto a debate», afirma Carlos Corominas.
Pero, más allá del enfado por «no haber sido informados», las movilizaciones que preparan los estudiantes van dirigidas hacia «la pérdida de un 20% de compañeros y compañeras a tenor de los matriculados este año, con lo que se restringe el libre acceso a la educación superior».
También se cuestionan los estudiantes, por propia experiencia, si «al disminuir el número de alumnos de primer año, el Rectorado va a permitir el desdoble de grupos o se van a quedar en uno solo de cien», extremo éste que, estiman, «repercutirá en el puesto de trabajo del profesorado adscrito».
Por todo ello, una veintena de estudiantes se encerraron el jueves y salieron el viernes «para dar visibilidad al problema». Ahora realizarán «un referendum entre los estudiantes para conocer la opinión del alumnado, al tiempo que programamos otro tipo de actuaciones para poner de manifiesto este atropello a la igualdad de oportunidades».