Asturias espera una ola de calor

Dicen todas las predicciones que Asturias tampoco se va a librar. Que, aunque con mucha diferencia respecto a otras zonas del país, aquí el calor se hará notar con ganas hasta el martes, cuando el calor podría empezar a remitir, al menos en algunas zonas. Pero ayer el cielo, en Asturias, dio un respiro. Nubes, niebla y temperaturas máximas que, ni de lejos, alcanzan las registradas en otros puntos. Los 42,1 grados de Córdoba; 41,5 de Sevilla; 40,8 de Badajoz y 40,7 de Mérida quedan a mucha distancia de los 28,3 registrados durante la jornada de ayer en Degaña, temperatura más alta recogida por la Aemet en el Principado y seguida de los 27,3 de Ibias, los 26,3 de Somiedo y los 24,9 de Aller. Mientras media España continuaba en alerta y las autoridades sanitarias se esforzaban por evitar riesgos, en el Cantábrico se echó de menos el sol.

Durante esta madrugada y primeras horas de la mañana el cielo seguirá nuboso y con bancos de niebla. La tarde llegará despejada y las temperaturas irán subiendo. Hoy se esperan máximas de 33 grados, por ejemplo, en Llanes y Cangas del Narcea, 28 en Oviedo y Avilés y 26 en Gijón. Eso, según la Agencia Estatal de Meteorología. Son datos que en ningún caso hacen activar las alarmas en Asturias, entre otras cosas porque para ello las temperaturas mínimas deberían bajar de los 18 grados, a la vez que las máximas superaran los 30.

La Aemet había advertido de que las cosas empeorarían el martes con «una última oleada de ascenso de temperaturas que afectará a la cornisa cantábrica», superando los 30 e incluso los 34 grados. Así lo había recogido el Principado, a través de su Observatorio de Salud, que señalaba los 34,7 grados que se esperaban para mañana. Pero lo cierto es que en la tarde de ayer, la Aemet recogía en su página previsiones mucho más suaves, con una máxima de 29 solo en Cangas del Narcea. En cualquier caso, en Asturias no se encenderán las alertas amarilla y naranja, que tiñen prácticamente el resto del país.