Las carreteras más peligrosas de Asturias

Cuidado. Las carreteras asturianas viven días de pasión. El 'boom' turístico del verano desemboca en una 'operación retorno' en la que se prevén 130.000 desplazamientos a lo largo del fin de semana. Es la mayor movilización en cuatro estíos y para librarla conviene saber los tramos en los que, con más tráfico, se disparan las posibilidades de sufrir un accidente.

Un repaso a los estudios del Ministerio de Fomento, el Principado y la Dirección General de Tráfico (DGT) indica que el riesgo está repartido en Asturias, si bien su presencia abunda -o está mejor catalogado- en el área central y el suroccidente. Existen distintas formas de detectar el peligro y en función de la que se elija éste se presenta en uno u otro enclave.

El Índice de Peligrosidad (IP) por ejemplo es una fórmula según la cual el ramal de autovía al aeropuerto (A-81) y la carretera al puerto de Pajares (N-630) son las calzadas de más riesgo en la red estatal. La AS-328 Avilés-Faro, la AS-112 Ujo-Cabañaquinta y la AS-340 Corao-Cuevas del Mar le dan la réplica en la autonómica.

El IP divide el número de accidentes con víctimas ocurridos en un lugar entre el tráfico que soporta y la longitud del tramo. Es una de las fórmulas a la que más valor conceden los ingenieros de tráfico, pues permite comparar mejor el riesgo al que se expone el conductor en cada una de las vías.

Según el Plan de Movilidad del Principado, el IP medio de la red regional está en 28,44 puntos. Partiendo de esta base resulta que quien circula por el puerto de Pajares tiene casi el doble de posibilidades de sufrir un accidente. En el ramal al aeropuerto el peligro se triplica.

«Un caso de libro»

«Ese tramo es un caso de libro de mala transición», explica Raimundo García, presidente de la Asociación Española de Accidentología Vial (AEAV). «El conductor viene de una autovía con una velocidad de diseño muy alta y de golpe se encuentra en un tramo que le marca una reducción brusca de velocidad que te parece irreal, puesto que sigues circulando con doble calzada de escasa curva», apunta García. «Como te dejes llevar por esa impresión, te encuentras pronto con una glorieta que ya te obligará a frenar de forma brusca; habría que reforzar con resaltos o señalización luminosa la necesidad de ir adecuando la velocidad progresivamente», propone.

Los riesgos que la matemática atribuye al Pajares generan dudas entre los transportistas. «Es exigente, pero no tengo la sensación de que sea el peor de Asturias», opone Alejandro García Monjardín, de la cooperativa Cesintra. «Hay otras que engañan más, como la N-634 por Infiesto; tiene curva, mucha sombra y como ves poco tráfico puedes confiarte, llevándote un susto con las placas de hielo y la niebla», argumenta.

Los Índices de Peligrosidad atribuye sin embargo el mayor riesgo a las AS-328, AS-112 y la AS-340, con valores que superan los 200 puntos. Es decir, recorrerlas es como poco cinco veces más peligroso que subir el puerto de Pajares.

Existe una fórmula similar que contrapone el tráfico de cada vía con el número de muertos registrados en ella. Este Índice de Mortalidad (IM) pone el foco sobre otros sitios diferentes. La AS-236 saca 33,4 puntos de IM cerca de Pravia; es un valor que multiplica por 38 el riesgo promedio de sufrir un accidente mortal en la red regional. En Avilés, las proximidades de Alcoa arrojan un dato que multiplica por 25 ese riesgo medio.

Números que engañan

Viajar por los datos de la seguridad vial obliga a estar atento a los matices, y más en lo tocante a los muertos. En enero de 2013 por ejemplo el Ministerio del Interior informó de que en Asturias perecieron en accidente 32 personas a lo largo del año anterior, lo que no era del todo cierto. Ese cómputo sólo incluía a quienes perecieron en las 24 horas siguientes al siniestro. La imagen fue incompleta, pues excluyó a otras 16 personas que fallecieron en el hospital después de ese lapso.

Con la terminología más popular, la de los 'puntos negros', ocurre parecido. La DGT sigue elaborando estos listados, que reflejan los tramos que tienen 100 metros de longitud o más, y han registrado tres o más accidentes en el último año. Según el último recuento, el peligro así medido se sitúa en la AS-15 a la altura de Puente del Infiesto, la AS-213 en Naviego, la AS-238 en La Piñera y la AS-239 en Cancienes. En 2013 quince vehículos sufrieron percances en estos sitios, con un balance de un muerto y quince heridos.

Los 'puntos negros' son coyunturales; los accidentes múltiples destacan tramos que normalmente tienen escasa siniestralidad. Para evitar estos vaivenes, el Ministerio de Fomento acuñó -y señalizó- los Tramos de Concentración de Accidentes (TCA), que son segmentos de al menos 1.000 metros que en los últimos cinco años acumula un número de siniestros muy superior a la media. Bajo este sistema el riesgo se encuentra en la AS-246 en Porceyo (sus datos le sitúan durante nueve años como TCA), la AS-111 en La Belonga (seis años lleva de TCA), y la AS-117 en Sama y entre Riaño y Tarna (otros seis años).

Los técnicos de Fomento y la DGT acostumbran a poner estos listados en las mesas de sus superiores para que tomen medidas. «Está muy bien corregir, pero si los muertos que lo fueron en esos sitios hablaran, preguntarían que por qué no lo hicimos antes», admite García.