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Tres de cada cuatro pisos de alquiler para turistas carecen del permiso del Principado

De las 306 viviendas que se alquilan en la región a través de plataformas digitales, solo 74 están dadas de alta en el registro oficial de Turismo

CHELO TUYA

GIJÓN.

Martes, 29 de agosto 2017, 02:42

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El 10 de agosto de 2016, el Gobierno regional aprobó el decreto que regula las Viviendas de Uso Turístico (VUT). Con él dijo dar respuesta a una vieja demanda del sector turístico asturiano. Los empresarios reclamaban el control de estos alojamientos, propiedad de particulares, que desde el mercado del alquiler competían, sobre todo, con los hoteles urbanos, pero también con casas rurales e, incluso, con bungalós de campings. Los empresarios criticaban la falta de registro de clientes y de cotización a Hacienda y la Seguridad Social. Les calificaban, directamente, de «oferta pirata».

Un año después de aquel decreto, en el registro oficial creado por la Consejería de Industria, Empleo y Turismo para que estas viviendas privadas se dieran de alta como alojamiento turístico aparecen 398 solicitudes. Son 398 personas que quieren que sus propiedades sean dadas de alta como VUT. De ellas, solo 74 tienen ese permiso en vigor.

Sin embargo en las plataformas digitales aparecen hasta 306 viviendas asturianas destinadas al alquiler con fines turísticos, lo que significa que solo una de cada cuatro tiene licencia en vigor. Es lo que demuestra una comparativa realizada por EL COMERCIO. El último listado oficial del registro de turismo cuenta con 398 solicitudes. Alguna de ellas, desde noviembre del año pasado y, sin embargo, siguen 'en tramitación'. Con el sello 'vigente' figuran tan solo 74 pisos.

Llanes multiplica por 15

Ese reparto tiene a Gijón como protagonista, con 40 residencias privadas con el sello VUT. Le siguen Llanes, con siete pisos con autorización; Avilés, con cinco, y Ribadesella, con cuatro, mientras Oviedo tiene tantos pisos autorizados como Tapia de Casariego: uno. En Luarca, por ejemplo, no hay ninguno.

Frente a estas cifras del registro oficial, la disponibilidad de la que hacen gala las plataformas digitales es muy superior. Para la principal central de reservas de este tipo de alojamientos, Airbnb, en Gijón hay 148 pisos disponibles, un volumen que no solo triplica al de viviendas en la ciudad con autorización del Principado, 40, sino también la de propietarios que han solicitado registrarse: 139.

Las diferencias se agrandan por concejos. En Oviedo solo hay una vivienda con permiso en vigor. Sin embargo, en la plataforma digital aparecen 78 pisos disponibles. Todos en la modalidad de alojamiento turístico. Casi el doble de los que han solicitado permiso oficial: 47.

En Avilés, la diferencia casi se multiplica por cuatro: de los cinco pisos con sello VUT se pasa a los 18 que aparecen en la web. El caso más llamativo es el de Llanes. De acuerdo al registro del Principado, solo hay siete pisos en la villa que puedan ser utilizados con fines turísticos. Otros sesenta están a la espera de que se tramite su petición. Sin embargo, en Airbnb aparecen 102 alojamientos. Quince veces más que los oficiales.

Apartamento por 72 euros

No se salva el occidente de esta competencia. En Tapia solo hay un piso VUT, pero aparecen nueve en alquiler turístico. Peor es lo de Luarca: oficialmente no tiene ningún piso con licencia en vigor y solo dos con solicitud en tramitación, pero en Airbnb aparecen 35 alojamientos.

No estar dados de alta en el registro oficial les exime de las normas que implica el decreto, como pagar a Hacienda y tener un seguro de responsabilidad civil de más de 150.000 euros. Y les permite abaratar costes: en Gijón, el próximo fin de semana se alquila un apartamento completo con vistas a San Lorenzo por 72 euros las dos noches. Muy cerca de ese piso, sin límite de ocupantes, un hotel pide, para el mismo fin de semana, 267 euros en habitación doble.

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