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YOLANDA DE LUIS
Lunes, 16 de junio 2014, 00:51
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El crecimiento de la población de palomas en la ciudad se ha convertido en un problema en algunos puntos del casco histórico, especialmente en las plazas en las que los establecimientos hosteleros tienen sus terrazas, ya que las palomas buscan los restos de los pinchos que quedan sobre las mesas sin importarle la presencia de personas a su alrededor y en ocasiones causando verdaderos estragos en la vajilla.
Ahora, por primera vez, habrá un control sobre estas aves dentro del programa anual que el Ayuntamiento destina al control de gaviotas y estorninos desde hace diez años. La empresa Locus Avis ha sido la adjudicataria nuevamente del contrato y en este ejercicio ha añadido una mejora a su plan de trabajo, inicialmente sólo dedicado a gaviotas y estorninos, para el estudio y control poblacional de palomas.
Según los datos que figuran en la adjudicación de este contrato realizada el pasado miércoles, los técnicos de esta empresa especializada en el manejo de la fauna salvaje atenderán las llamadas telefónicas y también acudieran al punto en el que los avilesinos se vean afectados por las palomas.
Además, realizarán un control sobre su población. En principio, prevén un trampeo con jaulas en vivo y también la captura nocturna con aves rapaces. No es la primera vez que se utiliza este último sistema en Avilés para controlar el número de palomas. El Real Avilés lo hizo en 2011 con dos halcones y cuatro azores que sobrevolaron el Suárez Puerta para alejar a las palomas y las gaviotas, habituales sobre el campo de fútbol.
Esta empresa lleva años trabajando en la ciudad en el control de aves y su metodología se ha demostrado efectiva para el control del crecimiento de la población de gaviotas y para evitar los problemas que causaban las grandes bandadas de estorninos especialmente en puntos como la calle del Marqués, colindantes con el parque de Ferrera.
En el caso de la población de gaviotas, se prevé la retirada de nidos y huevos de los tejados y otros puntos de la ciudad, así como la captura de ejemplares reproductores desde el mes de julio al 14 de septiembre, es decir, durante quince semanas.
Con respecto al control de los estorninos, los dos técnicos encargados del trabajo de Locus Avis en Avilés tienen previsto que el trabajo comience en diciembre y se alargue hasta marzo del próximo año, aunque no descartan que pueda ser con anterioridad si así se demanda por parte del Ayuntamiento ante la constatación de bandadas de estorninos en la ciudad. La empresa también asegura que a estos dos técnicos se podrán sumar otros once más si fuera necesario en momentos puntuales.
Y propone dos métodos complementarios para proceder a ahuyentar a los pájaros, uno de ellos será el de la emisión de sonidos de alarma en las zonas en las que se concentren las aves y el otro, a través del empleo de rapaces.
El Ayuntamiento contrata desde hace diez años este tipo de intervención medioambiental con el objetivo de controlar el crecimiento de las poblaciones de aves en el municipio. El presupuesto destinado a este fin este año se acerca a los 40.000 euros, concretamente dedica 39.863 euros. El plazo para la firma del contrato concluye el día 21 de este mes y estará operativo hasta marzo de 2015.
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