La comunidad internacional muestra su solidaridad con Francia, Túnez y Kuwait

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha condenado "en los términos más contundentes" los ataques terroristas perpetrados en Túnez, Kuwait y Francia y reclamó que los responsables sean llevados ante la Justicia.

Ban, a través de su portavoz, dijo que los ataques no harán más que reforzar la determinación de la comunidad internacional para combatir el terrorismo y derrotar a aquellos que buscan "muerte, destrucción y la aniquilación del desarrollo humano y la cultura".

El secretario general de la ONU trasladó sus condolencias a las familias de los muertos y los heridos y su solidaridad a los pueblos y gobiernos de los países afectados. El Consejo de Seguridad se sumó poco después a la condena y pidió también en un comunicado que los responsables sean llevados ante los tribunales.

El máximo órgano de decisión de la organización reiteró la necesidad de combatir "por todos los medios, de acuerdo a la Carta de las Naciones Unidas, las amenazas a la paz y la seguridad internacionales causadas por los actos terroristas".

El jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, ha enviado un telegrama al presidente tunecino, Béji Caïd Essebsi, en el que expresa su enérgica y rotunda condena por el ataque en Port El Kantaoui (Susa) y ha manifestado su apoyo en la lucha contra el terrorismo a un país aliado. "Actos como éstos repugnan a la dignidad humana y constituyen un quebranto inaceptable de los valores que compartimos, especialmente el respeto a la vida", ha indicado. El presidente del Gobierno ha reiterado que España "estará siempre al lado de los países amigos" y "aliados" en la lucha contra el terrorismo, así como contra "la sinrazón y la barbarie".

Los presidentes de la Comisión y del Consejo europeos, Jean-Claude Juncker y Donald Tusk, respectivamente, expresaron sus condolencias y solidaridad. Tusk, en la conferencia de prensa final de la cumbre europea, señaló que esos ataques "han ocurrido en un momento de guerra híbrida, de terrorismo global y ciberataques". "Me sumo al luto que afecta a una nación amiga, Francia, y a otras dos que son próximas, Túnez, sobre todo, y Kuwait. Lamento profundamente las víctimas de Túnez", dijo Juncker, que añadió que, "de todos los países que han pasado por la primavera árabe, Túnez es el que mejor ha sabido controlar la repercusión de esos eventos".

El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, aseguró en un comunicado que "nuestro combate contra el terrorismo debe ser implacable"."En un combate a largo plazo que exige toda nuestra determinación y nuestra unidad para no ceder a esta ideología criminal y totalitaria", enfatizó, a la vez que pidió que la UE refuerce su colaboración con sus socios en materia de seguridad, respetando los principios democráticos.

La alta representante comunitaria, Federica Mogherini, destacó que estos ataques "nos recuerdan que no hay país ni región que pueda ignorar el desafío de los terroristas", que pretenden "desestabilizar nuestras sociedades por medio de extender el miedo, la suspicacia y los prejuicios".

El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha defendido la unión frente al odio y al terror. "Italia abraza a los gobiernos y a los pueblos de Francia, Kuwait y Túnez. Todos unidos contra el odio y el terror", escribió en un mensaje publicado en la red social de Twitter.

"Nuestros pensamientos y oraciones están con las víctimas de estos ataques atroces, con sus seres queridos y con la gente de los tres países", ha dicho a través de un comunicado el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. EE UU está "decidido" a trabajar en un "esfuerzo común para luchar contra el flagelo del terrorismo", ha añadido.

La canciller alemana Angela Merkel ha apuntado que estos ataques "ponen en evidencia los desafíos a los que debemos hacer frente". "Nuestros pensamientos están con los familiares de las víctimas", ha declarado Merkel.

Rusia se ha sumado a la solidaridad por los atentados de este viernes. "Moscú condena decididamente esa bárbara acción terrorista contra tunecinos pacíficos y ciudadanos extranjeros, dirigida a torpedear la estabilidad y seguridad en Túnez. Calificamos lo sucedido como un crimen deleznable, que no tiene ni puede tener justificación. Sus organizadores y responsables deben ser castigados", señala una nota publicada en la web de la cancillería rusa.