Un patrimonio industrial sin protección
59 de los 113 bienes inventariados en el municipio se encuentra sin ningún tipo de catalogación
SUSANA NEIRA
Lunes, 9 de enero 2017, 00:20
Denominada también 'Cortixu' o 'Casa de les tres perrines', la Casona de la Regla fue construida por encargo de Antonio López de Dóriga para vivienda propia al lado de su industria, con la que el patio posterior de la casona comunicaba directamente. El edificio servía de oficina, la nave industrial y la casa del propietario, constituyendo un raro ejemplo de arquitectura industrial del siglo XVIII, reflejo de uno de los escasos intentos de industrialización propia que existieron en el Principado. De hecho, entre finales del siglo XVIII y finales del siguiente fue sede de dos industrias, una de cerámica y otra de curtidos.
Ante su importancia histórica y artística el complejo, restaurado como viviendas, fue declarado Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento. Es el único patrimonio industrial con la máxima categoría de protección en Oviedo. Casi la mitad, ni siquiera tiene protección. El municipio cuenta con 113 inventariados y de ellos solo 59 está protegidos. Unos con la segunda máxima categoría, como la fábrica de loza de San Claudio (prácticamente en ruinas, por cierto) y otros solo algunos de sus elementos, como la fábrica de gas o La Vega. El resto, nada.
Los datos forman parte de una radiografía sobre la situación del patrimonio industrial para ampliar su inventario y mejorar la conservación de bienes fundamentales en la historia de Asturias, donde en total se han contabilizado 1.700 elementos, de los que un millar cuenta con protección. Con el nuevo inventario, pretenden actuar los datos y ampliar la lista.
La documentación previa que maneja la Consejería de Cultura hace hincapié en algunas ausencias. Entre ellas, la nave de Ildefonso Sánchez del Río en la fábrica de armas de La Vega destinada a la producción en serie de piezas de cañones para armamento ligero.
También destaca, por ejemplo que «el corpus de la arquitectura quedaría incompleto sin el patrimonio social de las empresas, integradas por poblados de viviendas y equipamientos», entre ellos las viviendas de Junigro en Trubia.