El hijo de Villa quiso forzar el despido en el Montepío para acogerse al contrato blindado

Todo se hace por vigilar y mantener los intereses del Montepío de la Minería. Así se asegura desde la entidad para explicar, entre otras medidas, la destitución del hijo de José Ángel Fernández Villa al frente del deficitario geriátrico de Felechosa. Fuentes de la mutua han informado de que se intentó llegar a un acuerdo con Rolando Fernández, que se le quería dar otra oportunidad; pero él no lo aceptó e intentó forzar el despido, para poder beneficiarse de las estupendas condiciones que le brindaban tener un contrato blindado. Y desde la mutua se insiste: no se quiere pagar los 80.000 euros contemplados como indemnización. Al final, el caso se resolverá en los tribunales, ya que el afectado -que se encuentra de baja médica desde que fue destituido el pasado verano- y la mutua se verán las caras en el juzgado de Mieres el próximo día 21 de noviembre.

Previamente cabe conciliación, pero quien tiene que buscarla es el hijo de Villa, no el Montepío. Desde la entidad se entiende que el caso está «bien atado»; pero eso no significa que un juez lo pueda desatar. La decisión se adoptó, se asegura, de manera objetiva, ya que en 2012 se registraban pérdidas de 906.000 euros y, en 2013, de 659.000. De hecho, ya se encargó un informe jurídico que determina la ilegalidad del blindaje. El documento señala también que cabe la posibilidad, en el hipotético caso de que un juez falle contra el Montepío y entienda que hay que indemnizar a ese trabajador con los 80.000 euros, de que haya una responsabilidad económica del antiguo presidente.

Otra de las trabajadoras destituidas recientemente ha sido la responsable del complejo murciano de Los Alcázares, amiga cercana de Fernández Villa.

No se contemplan más destituciones y se da por finalizado el proceso de reestructuración de la entidad. De hecho, se informa de que el resto de personas afines al anterior responsable del Montepío, José Antonio Postigo, y que cuentan con contratos blindados, continúan en sus puestos porque no hay revanchismo de ningún tipo. Solo se mira por la gestión. Un ejemplo es el gerente del residencial de Roquetas de Mar, en Almería, un primo de Postigo. En este centro se han ido reduciendo, año a año, las pérdidas. El 2013 cerró con un saldo negativo de 29.000 euros, pero se espera regresar a los números negros a lo largo de este ejercicio. Gestión y, también, actitudes de los trabajadores, son las bases para desarrollar un proyecto, y no la apatía que al parecer presentaba Rolando Fernández. La hija de Postigo también mantiene su cargo en el área de administración porque, sencillamente, está haciendo un buen trabajo e, incluso, se le ha aumentado la carga.

1,4 millones de euros

Esta red tejida por Postigo no se conoció con su salida -el pasado mes de julio y tras asumir la dirección del Montepío Juan José Pulgar-, sino tras saberse que el ex líder sindical se había acogido a la amnistía fiscal del PP regularizando 1,4 millones de euros. Fernández Villa ha sido expulsado tanto del sindicato al que perteneció durante gran parte de su vida como del PSOE después de conocerse los hechos. Ha sido citado por la Junta General del Principado para comparecer, en su calidad de miembro del consejo de administración de Hunosa, y dar explicaciones sobre el origen de ese dinero. En el seno de la Cámara también se ha activado una comisión de investigación que se ocupará del asunto.