Afines a Sánchez sospechan de un «parón» en las afiliaciones en Asturias
La situación del censo provoca las primeras tensiones en las primarias socialistas
A. SUÁREZ / P. DE LAS HERAS
Miércoles, 15 de marzo 2017, 03:42
El equipo de Pedro Sánchez ha soltado una pequeña bomba. Quiere, y así lo solicitó ayer por carta, una reunión con el responsable de Organización de la gestora, Mario Jiménez, para hablar del censo que se utilizará en las primarias. Los colaboradores del ex secretario general sostienen que están en desventaja porque de las tres candidaturas, la suya es la única que no tiene acceso a la base de datos de los militantes con derecho a voto, una herramienta fundamental para la recogida de avales.
Su movimiento tiene un precedente. En las últimas semanas se han sucedido protestas de afines a Sánchez por el supuesto control del censo por parte de los aparatos provinciales y regionales partidarios de la presidenta andaluza (veto a afiliaciones o altas sospechosas). Ayer mismo, 'sanchistas' asturianos mostraron su sospecha de que algo así pueda estar sucediendo en el Principado. En concreto, en agrupaciones como Mieres o Avilés. Sí es cierto que, hasta la fecha, no ha habido ninguna denuncia en firme por parte del equipo del ex secretario general. Y eso es lo que le reprochan sus rivales, que ven un intento de embarrar el debate. «Si yo me entero de que en una agrupación se han tramitado o paralizado altas de forma injustificada lo denuncio, pero cuestionar el censo es una irresponsabilidad», reprochó Óscar López, coordinador de la candidatura de Patxi López.
Entre los afines a Susana Díaz, la andaluza Micaela Navarro pidió que no se siembren dudas sobre los procedimientos del partido. El caso es que algunas dudas sí existen. El reglamento de primarias establece que se debe poner a disposición de los precandidatos «los datos estadísticos de censo para saber cuánta militancia hay en su ámbito y el número de avales necesarios para presentar su candidatura». El problema es que, aunque ya hay tres aspirantes en liza, el congreso no ha sido formalmente convocado, de manera que en estos momentos no hay regla oficial que valga a la que apelar.