El IVA acelera la vuelta al cole

«Como sigamos así, vamos a tener que fotocopiar los libros, aunque sea ilegal», deja caer la portavoz del sindicato docente Suatea, Beatriz Quirós, porque «ya ha habido alguna familia asturiana que se lo ha planteado» medio en serio y medio en broma. Y porque, este año, la vuelta al cole se ha acelerado y son muchos los que ya han sacado la calculadora para llenar la cartera de los niños con el menor quebranto posible para el bolsillo. La clave está en septiembre, el mes tradicionalmente marcado en rojo por los padres por el desembolso económico que deben hacer de cara al arranque del curso. Un mes en el que tocaba comprar provisiones para todo el año: los libros, el material escolar, el uniforme en algunos casos, la ropa de abrigo o el calzado. Pero las cosas han cambiado: con la subida del IVA que entra en vigor el día 1, y afecta al material escolar, son muchas las familias que han adelantado sus compras a agosto y, estos días, en librerías como Roy no dan abasto, como explica Irene García, que lleva nada menos que 36 años en el negocio y que cuenta que esto de los libros y del material escolar es como los puñetazos: «Todo depende del colegio. Hay algunos que mandan comprar de todo y otros que, con menos, se arreglan».

Lo que sí es seguro es que los lápices, los cuadernos o las pinturas son algunos de los productos cuyo IVA pasará del 4% al 21% en pocos días. Traducido a euros, el material escolar costará de media 124 euros por niño, 14 más que si no subiera este impuesto el 1 de septiembre, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Y, aunque podría parecer una subida más, el presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), Jesús Sánchez, recuerda que «la situación económica de muchas familias es dramática». Y que «algunas no tienen ni para pagar los diez euros de cuota de la asociación de padres», sostiene. También Pili Hevia, con dos hijos de diez y ocho años, ha constatado cómo «mucha gente se lanzó a consultar las webs de los centros educativos para ver qué material iban a necesitar en cuanto se anunció la subida del IVA». Y cómo las filas de padres y madres colapsaban el Conseyu de Mocedá el primer día de entrega de material escolar de intercambio.

Ella consiguió tres libros al tercer día de espera. Y se encontró en la cola «con una madre con cuatro hijos y un marido que lleva tres años en el paro. ¿Qué hacen esas personas que no pueden pagárselos? ¿Llevan a los chavales a clase sin libros?», pregunta.

Esta defensora a ultranza de los programas de intercambio en los que también son pioneros centros como el IES Calderón de la Barca y el Colegio Público Federico García Lorca, subraya que resultan ser la solución para cada vez más familias de la enseñanza pública, la concertada e incluso la privada. Y eso, a pesar de que los libros mantendrán el IVA superreducido del 4%, al igual que los diccionarios, los blocs de dibujo y de música y las partituras. No así en el caso de cuadernos, gomas, plastilinas, pinturas, rotuladores y otro material de lo más diverso.

En total, sólo los libros de texto costarán de media (para un alumno de Primaria) de 215 euros, pero, aunque se salvan de la subida del impuesto, desde la CEAPA recomiendan reutilizar los textos y organizar mercadillos solidarios para intercambiarlos.

En cuanto a los textos escolares, «las distancias también son astronómicas», apunta Alberto Labrada, de la Librería Atenea, que puntualiza que, «para un mismo curso, hay unas diferencias de precio impresionantes». Tanto como que «en un colegio público los libros de primero de Primaria cuestan 200 euros y en otro, concertado, 400».

«Todo a un euro»

Pero, por si ese no fuese ya un gasto de envergadura, remata Pili Hevia, «hay profesores que te exigen, incluso, que las libretas o los rotuladores sean de una determinada marca con argumentos absurdos como que duran más o que son para compartir. Caprichos».

Y, a todo esto, las becas del Ministerio de Educación, en las que se prevé un tijeretazo que las deje destinadas «a pobres de solemnidad» no terminan de llegar (el año pasado el desembolso se realizó en diciembre), mientras que las municipales, relata esta madre gijonesa, «son becas sociales sólo para familias sin recursos con alumnos en Infantil y su importe asciende a 50 euros para todo el curso».

Con ese panorama, es el turno de las grandes superficies comerciales, que también han lanzado su particular ofensiva aprovechando el tirón de que sube el IVA y, en algunos casos, anuncian el material escolar con el efectivo eslogan de «Todo a un euro».

Lo confirma el director de comunicación y relaciones externas de El Corte Inglés, Alfonso Fuertes: «Nuestra campaña especial de vuelta al cole está funcionando muy bien y hemos podido comprobar que los clientes están llevándose antes los artículos de papelería, cuando era de lo que dejaban para el final». O lo que es lo mismo: reconoce «un incremento muy significativo» de las ventas este mes con respecto a otros agostos.

«Es lo que la situación requiere. Adelantar las compras para intentar minimizar el impacto económico», resume el presidente de la CONCAPA en Asturias, José Manuel Martínez, en nombre de las familias de la concertada.

Pero las consecuencias del funesto 1 de septiembre no concluyen ahí: hay otros gastos que pueden verse afectados por el alza. El precio del comedor podría aumentar por la subida del coste de los alimentos, que serán gravados con un 10% (antes el 8%). Y la ropa también se encarece. Renovar el armario de los pequeños será tres puntos más caro. El uniforme es una de las partidas más costosas de la cesta colegial según la OCU: 216 euros de media por alumno. Más el gasto del transporte escolar: alrededor de 88 euros de promedio.

En total, la factura suma 640 euros: 510 en centros públicos y 917 en los concertados, en los que además se abonan gastos de matrícula y son frecuentes las cuotas mensuales. El agosto de septiembre.