La Policía estrecha la vigilancia sobre los narcopisos de Mieres

La Policía Nacional trasladaba ayer un mensaje de tranquilidad a los vecinos de Mieres que acudían a sus dependencias para participar en una reunión en la que abordaron la problemática de los conocidos como narcopisos. Un problema de venta y consumo de droga que existe en varios barrios de la villa y ante el que los propios vecinos se han rebelado en numerosas ocasiones. Además, a través de desahucios por impagos ya se han cerrado algunos de estos pisos. Ahora, la Policía Nacional aumentará la vigilancia. También la Policía Local se sumará a esta iniciativa y reforzará esa vigilancia sobre los narcopisos.

Centra de manera especial la atención el barrio de Santa Marina, donde desde hace casi un año conviven con la venta de estupefacientes en uno de los pisos del portal número dos de la calle Siete Fuentes

Santa Marina es un barrio familiar y tranquilo y tanto sus vecinos como el Ayuntamiento y las fuerzas de seguridad quieren que así siga siendo. Por ello, se incrementará la vigilancia para que la actividad en el citado narcopiso disminuya hasta llegar a su desaparición.

Este problema se agravó hace un año aproximadamente, cuando la inquilina del mismo cambio de pareja y comenzó una incesante venta al menudeo, principalmente en horario nocturno, lo que altera el día a día de más de una treintena de familias de la zona, en especial a las cinco que conviven en su mismo portal.

Jesús Viejo es uno de los vecinos afectados y ayer reconocía, tras reunirse con la Policía Nacional, que «nos han transmitido mucha tranquilidad, nos han escuchado y nos han dicho que contamos con su apoyo para lo que sea».

«Les pudimos transmitir lo que vivimos al día a días, somos optimistas con las medidas que puedan tomar». Por el momento, las posibles movilizaciones planteadas por los vecinos quedan aplazadas. Además la citada pareja problemática ya ha recibido una primera notificación de desahucio, contra la que han apelado, tras llevar cerca de catorce meses sin pagar el alquiler de la vivienda.

«Por el momento -reconocían los vecinos- la situación es la misma que hace un año con una pareja que no sabe convivir, deja a uno de sus perros suelto por el portal y ahí hace sus necesidades, además de estar muy cercanos a todo el mundo del trapicheo de droga».

A la reunión de ayer acudió también el edil de Seguridad Ciudadana, Francisco García, que manifestó tras la misma que «la Policía Nacional está al cien por cien con los vecinos». «Entienden la problemática y en conjunto con la Policía Local intentaremos aumentar la vigilancia para erradicar el problema», añadió.