Los problemas vecinales se recrudecen en el barrio langreano de El Puente

El 2024 no está siendo sencillo, en materia de convivencia, para los vecinos del barrio langreano de El Puente. El enfrentamiento de uno de los habitantes con muchos de sus vecinos hace que la presencia policial en la zona sea habitual, pero lo peor como reconocen sus vecinos es que «no podemos seguir viviendo con esta tensión, tenemos miedo de encontrárnoslo e incluso de mirarle a la cara». Aseguran llevar más de seis meses soportando «insultos, peleas y gritos», que hacen imposible la convivencia. Recuerdan que fueron los meses de febrero y marzo los más ajetreados con peleas casi continuas, pero que «la tranquilidad ya no volvió jamás al barrio».

A la una de la tarde este vecino, que muchos consideran conflictivo, y que viven en uno de los primeros pisos, quería dormir, según explicó a los agentes de la Policía Nacional personados en el lugar. Al no poder conciliar el sueño, presuntamente por los ladridos del perro -de raza pequeña- del vecino que vive encima de él perdió los nervios y espero en la escalera a que el dueño del animal bajase y presuntamente le agredió.

Así se lo explicaba el agredido a los agentes ante los que se quito la camiseta para mostrarles las heridas que le causó su vecino tras la agresión. Fueron el resto de vecinos los que, como ya es habitual, avisaron a las fuerzas de seguridad ante el temor de que «la reyerta fuese a más». No es la primera vez que entre estos dos hombres haya denuncias de agresión mutua, algunas de los cuales llegaron a juicio sin mayor recorrido.

Los hechos fueron puestos en conocimiento del Ayuntamiento, para pedirles que intente calmar esta situación que lleva. «Esto es un sin vivir que va a terminar con muertes», explicaba tras el altercado vecinal Julio Fueyo, alcalde de barrio y presidente de la Asociación de Vecinos San Lorenzo, del barrio langreano de El Puente. Los vecinos recuerdan que «hemos perdido el número de denuncias que han interpuesto contra este vecino, pero no sirven para nada».

Todos los vecinos coinciden a la hora de explicar la falta de seguridad que tienen ante este tipo de situaciones que se producen a cualquier hora del día o de la noche, y con los mismos protagonistas. Ambos vecinos del mismo bloque de pisos en la parte baja del barrio de El Puente. Por eso el resto de moradores de este histórico barrio langreano consideran que «esto no va a solucionarse nunca, están siempre a la gresca porque al vecino conflictivo todo le parece mal y siempre lo intenta arreglar a golpes y con insultos, y el otro le responde y ya tenemos lío», explica una de las vecinas

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