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Un asturiano estudia un panel con ofertas de trabajo en una oficina de empleo de la región.

Profesionales y ONG alertan de un atasco de dos años en las revisiones del salario social

El Principado cerró julio con 37.726 beneficiarios de 17.148 nóminas, la cifra más alta hasta ahora, pero 704 nuevos casos siguen sin respuesta

Chelo Tuya

Jueves, 27 de agosto 2015, 00:30

«A lunes 3 de agosto de 2015 se están tramitando solicitudes recibidas en la Consejería de Servicios y Derechos Sociales en el mes de junio de 2015». El Principado saca pecho con el último informe sobre la tramitación del salario social. No solo limita a dos los meses de espera para cobrar esta paga, a la que tienen derecho todas las personas que ingresen menos de 430 euros al mes, sino que rebaja a 704 las solicitudes que están aún sin atender. Hace solo un año, eran más de 3.000 las peticiones sin respuesta, algunos acumulando doce meses de espera.

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Sin embargo, a las entidades sociales de la región y a la Plataforma en Defensa del Sistema Público de los Servicios Sociales de Asturias no les salen las cuentas. Tanto las ONG como el ente de profesionales tienen casos, y muchos, que acumulan mucho más retraso que los dos meses anunciados por el Gobierno regional. Todos se remontan a 2013.

El problema es, como ya explicó a EL COMERCIO el secretario de Política Social de Comisiones Obreras, Juan José Palacios, que «la relación oficial del Principado no incluye las revisiones. Y esas son muchísimas».

Una cifra que no ha sido facilitada nunca, ni siquiera en los encuentros entre el Ejecutivo autonómico y los sindicatos para negociar el plan de concertación. «Dicen que no la tienen, que es muy difícil calcular ese dato, pero no encaja, porque desde noviembre cuentan con un programa informático que iba a agilizarlo todo», apuntan fuentes sindicales.

Ante la falta de información oficial, las entidades sociales y la Plataforma en Defensa del Sistema Público de Servicios Sociales, la protagonista de la 'marea naranja', aporta sus propias conclusiones. «Nosotros tenemos personas que están a la espera de cobrar el salario social desde hace más de dos años. Esperan porque tienen pendiente la revisión de su caso», explica Pablo Puente, director de programas de la Fundación Siloé.

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Sin cobrar, incluso, desde 2012

La entidad conoce de primera mano la situación de muchas de las personas que perciben el salario social, ya que muchos acuden al centro de día que ofrece calor, comida y apoyo en Gijón. «Nosotros notamos que, en los últimos meses, activaron muchísimo las nuevas peticiones. Empezaron a aprobar solicitudes muy rápido. Sin embargo, los que están a la espera de que les revisen su situación, o bien porque trabajaron o por cualquier cambio, están sin cobrar y no saben cuándo lo harán».

Una opinión que encuentra respaldo en la Plataforma en Defensa del Sistema Público de Servicios Sociales. «La lista de revisiones seguirá por 2013, si es que ya han llegado a ese año, porque había casos, incluso, de 2012», confirman los profesionales. Muchos de los integrantes de este ente son trabajadores, precisamente, adscritos al servicio de salario social. «Hay mucha demora en esos casos. El programa funciona muy bien con los casos nuevos, pero las revisiones siguen ahí. El problema no son solo las 704 familias que están pendientes de esa primera respuesta. El problema son las revisiones», insiste la plataforma.

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Un volumen desconocido que disparará aún más las cifras de récord que acumula el salario social en Asturias. De acuerdo a la estadística oficial, a 31 de julio eran 17.148 los asturianos que cobraban esta paga, una cifra que supone un total de 37.726 beneficiarios. Porque, como explican los expertos, de cada nómina del salario social viven 2,2 personas.

Eso significa que, en estos momentos, el 3,5% de la población asturiana sale adelante gracias al salario social. Es decir, que viven con poco más de 15 euros al día.

Y no son todo casos vitalicios. El salario social tiene un porcentaje de beneficiarios que la cobrarán de por vida, o bien por edad o bien porque sus condiciones de salud no les permiten incorporarse al mercado laboral. Pero, en los últimos años, la crisis económica llevó a cobrar esta paga a trabajadores que, tras perder el empleo, agotaron prestaciones.

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Así lo evidencian las altas registradas en lo que va de año: 4.290, casi tantas como en todo el año pasado, cuando fueron 4.638 los casos de nuevo cuño incorporados al colectivo de beneficiarios. Solo en Gijón, el incremento de peticiones fue el año pasado del 32%, al sumar 2.041 casos en solo un año, para superar la cifra global de 8.312 beneficiarios en la ciudad.

Para hacer frente a tanta demanda, el Principado tiene consignada una partida de 83 millones. Sin embargo, en siete meses lleva desembolsados ya 57,7 millones, el 70% del total. El año pasado, pagar 14.017 nóminas le costó 82,3 millones. Este año lleva ya 17.148 nóminas.

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