Barbón ve «muy muy difícil» que Asturias tenga presupuesto autonómico en 2023
La FSA prepara un programa para la próxima década porque «somos los únicos capaces de convertir en realidades los sueños de los ciudadanos
En sus tres años al frente del Principado Adrián Barbón ha logrado que la oposición apoye sus proyectos de presupuestos pero el presidente intuye que ... el borrador de cuentas de 2023 no correrá la misma suerte o al menos intenta quitarse esa presión. «Vemos muy muy difícil que se apruebe pero por nosotros no va a quedar», reconoció al término de la comisión ejecutiva de la Federación Socialista Asturiana (FSA).
La directiva «es pesimista» al respecto, por las «actitudes de crispación y tensión» que observa en el resto de formaciones, reconoció el también secretario general. Las tiranteces con IU y Podemos son cada día más evidentes, especialmente a cuenta del borrador de ley de calidad ambiental que impulsa el vicepresidente Juan Cofiño, un proyecto que el presidente arropó. «Que haya un desencuentro puntual no afecta en modo alguno al pacto de investidura», reiteró a la coalición. «No sé si alguien tiene interés en hacer escenificacion de diferencias por los resultados electorales o las encuestras, ahora bien, nosotros hemos declarado la guerra a la burocracia y la vamos a mantener, es un proyecto de este partido», insistió.
«No podemos jugar a estar en campaña un año, queda legislatura y la vamos a exprimir», instó.
«Asturias no está para elecciones, ya llegarán», abundó Barbón. Eso sí, su formación se ha puesto «en modo de trabajo de grandes proyectos» y sus siguientes pasos serán «el proyecto Asturias 2030», un programa con el que los socialistas quieren poner las luces largas y seguir fundiendo sus siglas con la región. «Somos el partido de Asturias, el único con capacidad de visión y una misión a largo plazo de convertir en realidades los sueños de los ciudadanos», presentó.
En el contexto actual la FSA se ve a sí misma como «el partido de las tres 'e', estabilidad, experiencia y esperanza». «Soy el presidente y conozco seguramente mejor que nadie la realidad política de Asturias, con la humildad de quien sabe que no todo lo hacemos bien», manifestó.
El presidente inició su comparecencia haciendo defensa del día del Orgullo gay. Respecto a ser junto a Castilla y León la única comunidad autónoma sin una ley LGTBi indicó que el borrador de la misma está ultimándose: «Si no llega en esta legislatura quedará encarrilada para que sea de las primeras leyes para la próxima».
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