Antroxu en Gijón | Niños 'bestiales' y antipolución

La contaminación en la mar y la playa volvió a estar presente en el antroxu gijonés. Los más pequeños, y no tan pequeños, siguieron la estela de la sardina Cuca, y sus ayudantes Roxi y el Pescanova, que estos días pregonan por todo lo alto sus cánticos contra los plásticos en la mar. Ayer hicieron lo propio en el XXXII Concurso Infantil de Disfraces celebrado en el Teatro Jovellanos, representando la escena de una pareja en la playa que dejaba basura en la arena y que era castigada por Moana, personaje sacado de Disney.

Los niños se unieron a Cuca y lanzaron una advertencia a través de los disfraces, como fue el colegio Honesto Batalón, coreando la consigna «Waterlu, la playa huele a vater uh». En el concurso de categoría individual una niña apareció en escena disfrazada de «la novia reciclada», con un vestido hecho con vasos y platos de plástico.

Las catorce agrupaciones que participaron en el pasacalles, así como los treinta y cinco pequeños que competían a mejor disfraz antroxero animaron y llenaron de colar el paseo de Begoña. Hubo temática de lo más variada, pero el reino animal se llevó la palma. Cebras, leopardos, tigres o elefantes fueron los que más abundaron, aunque también triunfó el disfraz de 'La bola de cristal'; el sistema solar con sus planetas y satélites; Astérix y Obélix, que transportó a todo el Paseo de Begoña al año 50 a. C.; seres mitológicos como ninfas, gnomos y dragones; medios de transporte que incluían aviones, trenes, coches y hasta caballos o el Sporting con un jugador gigante y un balón enorme, vigilados de cerca por un árbitro sin VAR.