Crece el malestar en educación por la «torpeza e incompetencia» para gestionar la desescalada

La comunidad educativa asturiana sigue trabajando en medio de la incertidumbre y el malestar, ante lo que algunas voces han calificado de «torpeza e incompetencia». El último 'capítulo' llegó el jueves, a las diez de la noche, cuando la consejería anunciaba en Educastur que los estudiantes no volverán el día 25 a las aulas. en la página de Educastur. Dice Educación que no se trata de un retraso porque no era una obligación arrancar ese día. Pero los centros se preparaban para ello. Y, finalmente, no será así, tal y como adelantó ayer EL COMERCIO. Asturias retrasará algunos días -aún se desconoce cuántos- la vuelta de los alumnos de segundo de Bachillerato a las aulas, y lo hace porque aún no es oficial (no lo será hasta el domingo, en principio) que la región pase a la fase 2. Faltará luego la publicación de la orden ministerial que regule la vuelta a las aulas. Y todavía después un tercer paso: que el Principado adapte a la comunidad dicho protocolo y anuncie, entonces sí, la fecha en la que regresarán los estudiantes y qué docentes deberán volver al trabajo presencial.

Este comunicado, como queda dicho, fue publicado a las diez de la noche del jueves. Pero lo cierto es que hacía ya bastantes horas que esa información era pública: se lo había dicho la directora general de Planificación, Ana Isabel López Isla, a los representantes de las organizaciones y patronales de la enseñanza concertada, con quienes se había reunido al mediodía. Llovía sobre mojado porque era la segunda vez que una decisión se trasladaba primero a la concertada.

Y así, la noche del jueves y durante el día de ayer, más confusión y malestar en la comunidad educativa asturiana. Centros informando a las familias de que por el momento no podrán pasar a recoger el material porque no saben qué personal estará trabajando. Otros, como el IES Doctor Fleming, de Oviedo, que se ha dirigido directamente a la consejería para solicitar que no se reabra hasta septiembre. Y los sindicatos que están cansados.

El que llevó ayer la voz cantante fue precisamente UGT, que lanzó un comunicado muy duro con la consejera. Primero, porque consideran «un abuso que la comunidad educativa tenga que estar comunicada 24 horas si quiere estar informada que los equipos directivos reciban comunicaciones a cualquier hora del día y en cualquier día de la semana, incluidos los fines de semana. Y que además, tengan que informar y llevarlos a cabo con carácter de urgencia». UGT exige a la Consejería de Educación «que ponga fin a esta manera de actuar. La torpeza, la incompetencia y el ninguneo sindical no son buenos argumentos en ninguna gestión de gobierno. Pero además, en esta parte del mundo las jornadas laborales están reguladas por ley. No vayamos a confundir el teletrabajo con la esclavitud».