«El Ayuntamiento no quiere cerrar las piscinas de Turón», dice el vicealcalde

El vicealcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez, fue taxativo: «Este Consistorio no quiere cerrar las piscinas de Turón». El equipo de gobierno local insistió en que «ha colaborado, colabora y colaborará con esta entidad -la asociación Mejoras del Valle- para la mejora y funcionamiento de esta instalación» y aseguró que no se ha reclamado ninguna cantidad a la entidad. A su vez, propuso una reunión la próxima semana para abordar «cualquier preocupación» que tenga la junta directiva.

«No se ha reclamado dinero alguno porque todavía no hay un cálculo de la cantidad», dijo en referencia a la posible factura del agua a abonar por parte del colectivo vecinal que gestiona las piscinas, si bien reconoció que los técnicos municipales «están analizando el asunto». «Todas las administraciones tienen la obligación de cumplir y hacer cumplir la ley, que es igual para todos», indicó. Por medio de un comunicado, desde el Ayuntamiento se apunta que «la voluntad del equipo de gobierno es formar parte de las soluciones a los problemas que pudiera tener Mejoras del Valle».

No obstante, desde la asociación vecinal se insiste en que «el requerimiento que nos llegó fue para realizar el enganche al agua y el Ayuntamiento nos informó de que por tres meses de verano teníamos que abonar 20.000 euros». Además, «se nos dijo que se iba a reclamar con cinco años de retroactividad. Esto nos hunde, no lo podemos asumir», manifestó ayer la presidenta del colectivo, Silvia Suárez.

Hasta ahora, la asociación no abonaba la tasa del agua. «Si hay que pagarla porque se trata de una obligación legal, está claro que el Ayuntamiento tiene que hacer cumplir la ley. Pero para esto no necesitamos políticos, nos vale con un sello», ironizó Suárez, quien instó al equipo de gobierno a «buscar soluciones para que no se produzca el cese de la actividad». Un posible flotador para la instalación, señaló, sería la firma de un convenio de colaboración entre el Consistorio y la entidad para ofrecer este servicio de ocio estival.

Manuel Ángel Álvarez destacó asimismo la importancia que juegan estas piscinas en el valle. Son unas instalaciones que suman 40 años de historia y a las que achacó algún tipo de problema, como fugas del agua. «Tenemos un dinero reservado para los arreglos», señaló Silvia Suárez al respecto, «pero con este problema de la tasa no podemos adentrarnos en esa obra que, como no se inicie antes de marzo, impedirá la apertura de las piscinas en verano».