Iberdrola instalará en Lada un generador para que el club de piragüismo disponga de luz
La alcaldesa de Langreo manifestó a la compañía eléctrica su malestar por el corte de suministro, que impedía a los deportistas ejercitarse
M. VARELA
LANGREO.
Jueves, 20 de enero 2022, 01:26
El club de piragüismo de Langreo volverá a tener suministro eléctrico después de que en la tarde de ayer Iberdrola y el Ayuntamiento langreano consensuasen una solución. La eléctrica se ha comprometido, sin coste alguno para el club deportivo, a instalar un generador eléctrico que suministre luz a la sede del club, ubicada en unas instalaciones pertenecientes a la central térmica de Lada, para que los deportistas federados, en torno a una veintena, puedan realizar sus ejercicios en el gimnasio. Algo que vienen realizando unas dos horas a la semana.
Una solución temporal que llegaba después de que la alcaldesa de Langreo se pusiese en contacto con Iberdrola haciéndoles ver su error y tratando de buscar la ansiada solución. En principio, se les ofertó utilizar el gimnasio del polideportivo de Riaño para que los atletas no perdiesen días de entrenamiento, pero finalmente se pactó la colocación de un generador. También intervino en las negociaciones para lograr un entendimiento la directora general de Deportes y federaciones regionales y nacionales, según puntualizó el presidente de Amigos del Deporte, Jorge Cuesta. Una presión que sin duda tuvo que ver a la hora de que la empresa Iberdrola reconociese como «error» el corte de suministro eléctrico a las instalaciones deportivas que fueron cedidas hace casi dos décadas.
Iberdrola, tal como adelanto EL COMERCIO, había procedido a cortar el suministro eléctrico a principios de la presente semanas «por seguridad». Y explicaban que el corte entraba dentro del plan de demolición de la central térmica de Lada que ya se está llevando a cabo, y que en la actualidad se centra en la zona de los silos y el parque de carbón.
La dirección del club acepta la propuesta, si bien son conscientes de que se trata de una medida temporal ya que el local que están utilizando aparece en los planes de demolición, y temen que tengan que proceder a su desalojo en el proceso de derribo de la central que se prevé dure unos tres años, aproximadamente. Un club que ya vivió a principios de año otro duro golpe al abrir las compuertas del río impidiéndoles entrenar en la zona de Lada.
