Premio Emilio Barbón al abrazo de la voluntaria de Cruz Roja a un migrante

El fallo se hacia público, como es tradición, en el salón de actos del Ayuntamiento de Laviana. En torno a las dos de la tarde. En esta ocasión el presidente del Principado de Asturias Adrián Barbón era el encargado de leer, «desde el sillón que tantos pleno presidí» recordó, el acta de concesión del galardón como presidente del mismo.

Un acta en el que los seis miembros del jurado, por unanimidad elegían este gesto entre las once candidaturas presentadas. «Tras la entrada en Ceuta de ocho mil inmigrantes marroquíes y subsaharianos, una de las organizaciones que, junto a la Guardia Civil y el Ejército, participó para socorrer a los que llegaban en malas condiciones, fue Cruz Roja. Movilizó a todos sus voluntarios en Ceuta, que acabaron desbordados y necesitaron el poyo de más voluntarios llegados de Andalucía. Los trabajadores humanitarios fueron testigo de una crisis migratoria sin precedentes en las costas españolas», leyó el presidente de Asturias.

Fueron los compañeros de la propia joven, como recuerda el acta, los que hicieron viral su gesto que dio la vuelta a medio mundo, Luna Reyes Segura «socorrió a un senegalés, ofreciéndole agua y ante su desconsuelo por la pérdida de algunos amigos en el intento, acabo abrazándole mientras el joven lloraba desconsolado en sus abrazos», puntualizan.

Luna, de 20 años, cuya familia es de origen ceutí vive actualmente en Móstoles, Madrid, y, estudia un grado de Integración Social, en esa época, mayo de 2021, estaba realizando prácticas en Ceuta.

Desde la fundación lavianesa ya se ha contactado con ella para intentar buscar un fecha, en torno al mes de octubre como es tradicional, para que pueda venir a recoger el premio en persona. Si bien el premio es extensible a todos los voluntarios y a la labor de Cruz Roja el jurado considera que es actuación de Luna «ejemplifica la labor de los voluntarios de la Cruz Roja».

La Fundación Emilio Barbón completó la jornada con una comida de confraternización, y a las 18 horas como es habitual cada año en la fecha en la que falleció el insigne político lavianés se rindió ante su tumba, en el cementerio de Pola de Laviana, un sincero homenaje floral y dialéctico a Emilio Barbón y su esposa Manolita Castañón.