La suspensión de fiestas populares acarrea la pérdida de casi un millar de empleos
M. VARELA
blimea.
Lunes, 20 de abril 2020, 00:57
La Xarana (Laviana), La Folixa (Mieres), La Flor (Lada), las fiestas de Barredos, en Boroñes, las pruebas de la sidra en Langreo, El Entrego, Sotrondio, Laviana... Son algunas de las fiestas que ya están suspendidas en las comarcas mineras. Y próximamente se prevé hacer lo mismo con San Antonio en Morcín y en Riosa, San Pedro en La Felguera (Langreo) y San Juan en Mieres.
Los organizadores de estos eventos estiman que se perderán en torno a un millar de empleos temporales entre camareros, orquestas, guardas de seguridad y montadores, entre otros. La mayoría de estos empleos suelen cubrirlos vecinos de las comarcas mineras del Nalón y del Caudal, que trabajan habitualmente en este tipo de eventos de abril a septiembre, aproximadamente. En algunos casos estos trabajos son su fuente de ingresos. No obstante todos entienden que estos aplazamientos son necesarios, pero el temor está ahí, en la merma de la economía de muchos núcleos familiares. En este sentido la empresa lavianesa organizadora de eventos Chapó explica que «una fiesta como La Xarana na primavera trabajaban unas trescientas personas y muchas de ellas continuaban con la empresa en diferentes evento. Pero ahora mismo no hay nada programado ni confirmado en meses».
Además, clubes deportivos, asociaciones de festejos y culturales verán reducidos sus presupuestos al no poder celebrar las tradicionales espichas populares, en las que trabajaban sus miembros para sacar dinero para sus agrupaciones.