«Esta distinción viene de gente a la que admiro, aprecio y debo mucho»
El Club de Guisanderas entrega a Juan Ramón Lucas la Guisandera de Oro y Cristina Rey, de La Gitana, se incorpora a las filas de la agrupación
«La cocina asturiana, que es una de las mejores cocinas de Europa, tiene en las guisanderas un referente vital», aseguraba ayer Juan Ramón Lucas, poco antes de recoger la Guisandera de Oro en el Palacio Valdés Bazán de Candamo. Allí se celebró la gala anual de esta agrupación gastronómica, que reunió a expertos en los fogones y también al director de Comercio, Julio Zapico, y a la viceconsejera de Turismo, Lara Martínez.
Todos ellos sintieron la emoción del periodista y escritor reconocido, quien prometía que esta distinción venía de gente «a la que admiro, aprecio y debo mucho porque están haciendo una labor cultural que va mucho más allá de la gastronomía, están conservando una tradición de muchísimo valor».
Además, se sentía orgulloso de ser nombrado «guisandera y no guisandero, que me parece que no es una cuestión menor». El género femenino da cuenta en esta palabra del carácter de estas cocineras que incluso aparecen en su última novela, 'Melina'. «Las guisanderas son parte fundamental de ese paisaje de mujeres bravas e independientes», cuya labor ha cambiado con el paso de los años, pero «mantener el nombre y el objetivo fundamental de su trabajo les concede valor».
El escritor las incluyó en su última novela, 'Melina', porque forman parte del paisaje de «mujeres bravas e independientes»
Juan Ramón Lucas no fue el único aplaudido ayer, porque Casa Menéndez, en Murcia, se convirtió en embajador del Club de Guisanderas y Cristina Rey, del restaurante gijonés La Gitana, se incorporó a las filas de esta asociación llena de mujeres a las que en Asturias «deberíamos valorar un poco más».
