Empresarios y sindicatos confían en que «la consejería no quede diluida»

Calvo, que en nombre de Fade dijo respetar la decisión de la ya exconsejera y agradecer su trabajo – «su dimisión le honra como persona y profesional, y demuestra su compromiso con el interés general y la estabilidad institucional que Asturias necesita»–, confió en que «el proceso de investigación del accidente en la mina de Cerredo avance con la mayor transparencia y celeridad posible, y que esta situación no altere el rumbo de una política industrial que debe mantenerse estable».

El también recién elegido secretario general de la Federación de Industria de CC OO, Ignacio Requena, señaló que «la industria no puede esperar» porque es «un área fundamental para el futuro de Asturias». Por eso, instó al Ejecutivo de Barbón a «encontrar el mejor perfil para liderarla teniendo en cuenta las características del territorio y el momento de incertidumbre actual». Desde su punto de vista, «no es de recibo» que un departamento que está llamado a «estar frente al cambio de un modelo productivo» y propiciar la soberanía productiva «tenga este carácter interino de los últimos años». Sobre el terrible accidente, reclamó «una investigación exhaustiva» para que no se repita y «depurar todas las responsabilidades, desde las penales a las políticas. Se les debe a las familias».

Por su parte, el secretario general de UGT Asturias, Javier Fernández Lanero, en sintonía con lo manifestado por María Calvo, consideró que Belarmina Díaz «estaba haciendo un gran trabajo durante estos meses frente a la Consejería de Transición Ecológica, Industria y Comercio».

Y, en concreto, sobre el accidente consideró que «desde el primer momento ha estado comprometida con saber toda la verdad y que se hiciese justicia». De hecho, apuntó, «acudió de manera voluntaria a dar todas las explicaciones a la Junta del Principado» e insistió en que «las estaba dando además de poner en marcha de manera rápida todas las comisiones de investigación».

Confió en que «con esta dimisión se acabe todo el ruido al que estamos asistiendo en la Junta, puesto que vemos que, más que comprometidos con saber la verdad, se está haciendo un uso político de este grave accidente con el único fin de desgastar al gobierno. Puede perjudicar las comisiones abiertas y, además, es muy injusto para las familias. La memoria de los fallecidos no se merece hacer un uso político».