La enfermedad, causa de baja para uno de cada cuatro afectados en edad laboral

La última semana del mes de diciembre de 2019 se despidió prácticamente duplicando la cifra de afectados por la gripe en Asturias. Pasar de 66 a 140 casos por cada cien mil habitantes supuso superar el umbral epidémico, establecido esta temporada en 91 casos por cada cien mil habitantes, y, al mismo tiempo, un aumento de la presión asistencial en los centros de salud y hospitales de la región. Salud prevé que la incidencia continúe aumentando «significativamente» en las cuatro o cinco semanas y que alcance el máximo de actividad gripal a finales de enero. A partir de entonces, los virus irán en retroceso. De momento, y aunque la intensidad de la gripe se califica como «baja» y de difusión «esporádica», ya ha sido motivo de baja para uno de cada cuatro afectados en edad de trabajar. Otro dato que permite conocer la información de la red de médicos centinela del Principado es que, de todos los casos detectados, el 6% se había vacunado contra la gripe.

Hasta el momento hay muy pocos casos ingresados con gripe confirmada (tres por cada cien mil habitantes), de los que el 30% se consideran graves. Lo que no se han registrado por ahora son víctimas mortales. Junto con Asturias, País Vasco, Navarra y Ceuta son las otras regiones en las que, a estas alturas, ya se ha iniciado la onda epidémica gripal, mientras que en el resto de España la incidencia sigue siendo baja.

Por otro lado, el grupo municipal de Podemos en el Ayuntamiento de Gijón reclamó ayer a la Consejería de Salud que realice el «mayor esfuerzo» en la red sanitaria pública para aliviar las listas de espera y evitar que prácticamente la mitad de la actividad quirúrgica en Gijón este año la realicen los centros concertados de Jove y Cruz Roja.