«Esperamos que esta sea la última vez que nos manifestemos para lograr la cooficialidad»

La Xunta pola Defensa de la Llingua (XDLA) convocó a todo aquel que quisiese unirse a la causa a mediodía en la Estación del Norte de Oviedo, desde donde partió la manifestación, y casi una hora antes de esto ya comenzaban a verse por la zona entusiastas de la oficialidad, muchos de ellos portando banderas de Asturias para la ocasión.

La marcha comenzó con algo de retraso, y con los miembros de la XDLA a la cabeza, que ya se mostraban satisfechos con el número de asistentes, incluso antes de comenzar a caminar. «Lo de hoy es una fiesta. Llevamos más de 40 años esperando este momento y esta es la primera vez que parece que vemos el final del camino. Sabemos que por ahora no hay nada asegurado, pero es la oportunidad de terminar de una vez por todas con esta injusticia y carencia democrática que sufrimos los hablantes del asturiano y el gallego asturiano. Esperamos que esta sea la última vez que nos manifestemos para lograr la cooficialidad», expresó Xose Candel, portavoz de la XDLA, quien aseguró que la asistencia superaría las 30.000 personas, aunque la Policía Nacional calcula que fueron 8.000 las personas que se congregaron en el punto final de la manifestación, en la plaza de la Catedral.

A pesar del positivismo, Candel también quiso asegurar que una oficialidad «recortada» no es el objetivo final. «Queremos que se reconozca el derecho de las personas a escoger el idioma en el que quieren expresarse en todos los ámbitos, y eso pasa por la educación en todos los niveles, acordándose de los adultos que no pudieron aprenderlo cuando eran críos», detalló.

Entre los asistentes destacaban personas de todo tipo de perfiles, edades y clases, todas ellas unidas por la idea de que «tiene que haber igualdad de derechos entre los castellanoparlantes y los asturparlantes, hablar tu propia lengua es un derecho que debería tener todo el mundo», afirmó Ana López, vecina de Piedras Blancas. «Las encuestas dejan claro que más de la mitad de los asturianos está a favor. Lo que se tiene que entender es que no es una imposición, sino una posibilidad», añadía su hermana, Marta.

La cabeza de la manifestación tardó algo más de una hora y media en enfocar la calle San Francisco para subir hasta la plaza de la catedral, donde el DJ Fruela 757 amenizó la espera hasta que la plaza estuvo llena. Fue entonces cuando subieron al escenario la actriz María Cotiello y el comunicador David Arango, quienes fueron los encargados de leer el manifiesto de la XPDL. «En Asturias llevamos perdiendo tres décadas de derechos y de oportunidades, y los representantes de la sociedad en la Junta General son conscientes de esto. Hoy salimos a la calle para recordarles que ni un día más, y ni un derecho menos», indicó Cotiello, arrancando de los asistentes el grito de «¡Ya, ya, ya, oficialidá!», que acompañó a lo largo de toda la duración del acto a los manifestantes.

«Cuando se quiere reconocer un derecho democrático siempre aparecen resistencias desde los sectores más reaccionarios, pero esos pocos, por mucho apoyo que tengan en algunos medios de comunicación, no van a parar los avances democráticos, ni tampoco lo hará una minoría parlamentaria que confunde sus propios prejuicios con la realidad», añadía David Arango.

Tras la lectura del manifiesto, se dio paso a la proyección del videoclip del tema creado para esta manifestación, bautizado como 'Llegó la hora', y la jornada puso fin con un pequeño concierto de Rodrigo Cuevas. El músico fue muy aplaudido por los presentes, y él, muy animado, aprovechó su actuación para reivindicar, además del derecho de cada ciudadano a expresarse en la lengua que desee, de que no se haga de menos a nadie por ello. «Cuando os digan que la lengua asturiana no sirve, no os lo creáis. Yo no estaría donde estoy si no fuera por ella», expuso el artista.