«Era difícil igualar las ventas de 2019, pero lo conseguimos»

Muchos reconocían haber llegado al certamen con incertidumbre, después de que la última Feria hubiese estado marcada por la pandemia, y con la intuición de que sería complicado igualar las ventas del año 2019. «Era difícil, pero lo conseguimos», celebraban.

La elevada afluencia se notó especialmente en los diferentes locales de hostelería, refugio para el público del ferial en los numerosos días de calor y las largas jornadas de paseo y compras. En el sector hostelero apreciaron especialmente que, pese al incremento de público, las visitas estuvieran niveladas o repartidas de forma equitativa. «Agradecemos que no hubiera aglomeraciones», señalaba Mari Luz Suárez, de El Cuco. «Ha sido una feria distinta al no haber días específicos para las invitaciones. De hecho, hemos recuperado familias que hacía años que no venían». Coincidía con ella Lorena Rodríguez, de Costa Verde: «Ha ido mejor de lo esperado, y lo que más nos gustó es que el público fue muy nivelado. Todos los días había mucha gente y eso te permite atender mejor». Hasta el último día lo notaron en El Chilu, donde Ima López también afirmaba que esta edición superó incluso la de hace dos años.

En otro clásico de la gastronomía de Feria, el puesto de sándwiches y tartas San Martín, Celia Matías hacía este balance: «Nos ha ido muy bien, hemos tenido mucha gente, más que otros años». Como apuntaba José Manuel Montis de Toscaf, «tras una feria de confinamiento todo nos sabe mejor. Nos ha ido muy bien, el tiempo ha favorecido y el momento emocional y las ganas de salir nos han beneficiado».

No solo acudía el público con ganas de comer bien, sino también con gran espíritu solidario. Así lo constataron las numerosas asociaciones y entidades benéficas presentes en la Feria, que además de captar socios ven en ella un escaparate para difundir su labor. «No buscamos tanto ganancias sino difundir nuestra labor», concretaba Antonio González, del Albergue Covadonga. En la Fundación Aladina buscaron, con gran éxito, implicar a los más pequeños a través de diversas actividades y según Rita Buenache «ha ido muy bien». Tanto en la Asociación Española Contra el Cáncer como en Alcer Asturias lograron recaudar fondos y captar socios y donantes. En el estand de la Protectora de animales recibieron a «mucha gente interesada en las adopciones e informándose por cuestiones relacionadas con el comportamiento de sus mascotas».

Con una amplia oferta, distintas marcas y grandes descuentos, el sector del motor es cada año uno de los más demandados, tanto en lo que se refiere a ventas cerradas como en contactos que, una vez culminada la feria, pueden incrementar la cifra de ventas. «Vinimos con pocos coches, pero nos vamos muy contentos: hemos tenido buenas ventas», aseguraba Yolanda Alexandre, de Artedo Motor, donde cerraron la venta de 60 vehículos. También en Peugeot hacían un balance positivo. «De lo que hemos traído se ha vendido el 80%, unos 40 coches», cifra similar a la de la última edición, explicaba Daniel Díaz.

En Volvo notaron la gran afluencia, aunque echaron de menos mayor intención de compra. Víctor Viejo confía en que fructifiquen los contactos. En Caravanas Principado, tras el 'boom' de las autocaravanas que experimentaron el año pasado vivieron un fenómeno similar con las furgonetas camperizadas, aunque José Luis Casielles reconocía que «no vendimos tanto como el año pasado, pero estamos contentos». Según Jesús Atorrasagasti, de Motos Gijón, «la primera semana fue buena, aunque la segunda mala». En cualquier caso, fue «mejor que la anterior».

Algunos expositores se estrenaron en la Feria y pudieron comprobar que es «el mejor escaparate». Es el caso de JJ Gestión Inmobiliaria, cuyo responsable, José Luis García, señalaba que gracias al certamen «generamos contactos y damos visibilidad al nuevo negocio». También era la primera edición de Laura Santiago, de la tienda de ropa Serendipity. «Nos hemos dado a conocer en nuestro primer año». Otro que hizo «muchos contactos» fue José María Fanjul, de Neumáticos Fanjul. Y tanto en Seguros Santalucía como en Tinastur festejaban que «hubo muy buena afluencia, con mucha gente pidiendo información». La Feria Internacional de Muestras de Asturias se celebra en agosto, pero sus efectos se seguirán notando, seguro, durante el resto del año.