Gracias por tu humanidad

Querida amiga: Recuerdo hoy aquel primer encuentro hace más de veinte años, en la avenida General Elorza, de Oviedo. Eras en aquel entonces la responsable del servicio de Autorizaciones de Centros Sanitarios. Desde el primer instante ví en ti las señas de identidad que se consolidaron durante estos años: tu sonrisa eterna, tu actitud siempre proactiva y eficaz en la resolución de problemas, esa habilidad característica para interpretar la realidad con sentido común y coherencia, y un infinito trasfondo humano. Me vienen en estos momentos recuerdos de aquellas conversaciones lejanas sobre la importancia de que el mundo de las ambulancias se incorporaran al mundo de la calidad, de las ISOS. Fue de tu mano que conocimos y nos adentraste en ese ámbito, presentándonos también a las personas que lo lideraban en Asturias, Juan Lucas García, de Aenor, sabe bien de qué hablo.

Precisamente, te invitamos a acompañarnos en el acto del décimo aniversario de Transinsa como empresa única y también cuando fuimos la primera del sector en España que obtenía una certificación EFQM. En ambos actos quisimos reconocer públicamente que sin tu impulso y ánimo nunca habríamos emprendido ese camino hasta obtener cinco certificaciones ISO de Aenor y la mencionada EFQM.

Durante todos estos años, en tus distintas responsabilidades de dirección y calidad en el HUCA, dirección médica del Hospital de Jove, gerente en Área III y finalmente en el Área Sanitaria V, siempre mantuvimos el contacto y nunca dejamos de recoger y acoger tus consejos para nuestro camino a la excelencia y mejora continua del transporte sanitario.

También fuiste maestra y madrina de nuestro 'Proyecto de Humanización', junto a tu inseparable Amalia Franco habéis sido fuente de inspiración y conocimiento desde hace años para nuestros equipos de trabajo de humanización y mejora de la experiencia paciente.

Cuando a finales del año pasado supe de tu disponibilidad al cesar en tus cargos como gerente en el Área V y teniendo vacante el puesto de Directora General de Transinsa, no dudé un instante en ofrecerte el puesto, siendo ambos conscientes de que la maldita enfermedad te acechaba, pero con ella habías conseguido convivir. Nuestra ilusión conjunta y tu enorme profesionalidad y capacidad de trabajo nos empujaron a iniciar el camino juntos definitivamente .

A primeros de año te incorporaste a nuestro proyecto Transinsa y a mediados de febrero el COVID-19 irrumpía en nuestro camino. Nunca podremos agradecerte lo suficiente tu esfuerzo por guiar y asesorar a toda la organización en esta lucha feroz contra el coronavirus: tus conocimientos como experta en Salud Pública y Epidemiología se tornaron más importantes que nunca, y el éxito con el que hemos logrado que Transinsa haya superado los picos más altos de la pandemia sin apenas incidencia sanitaria en sus trabajadores, es sin duda también tu éxito. Lograste organizarnos a tod@s entorno a tus conocimientos y capacidad de gestión: hicimos frente con las armas de la formación y la emoción –como siempre decías– y fruto de ese trabajo y esfuerzo, hoy preservamos la salud de todas nuestras personas.

Me despido de ti con estas pocas palabras, llenas de afecto y un sinfín de emociones y la gratitud por haber podido contar en nuestro camino con una gran profesional y mejor persona. Cada día con nosotr@s has intentado sacar lo mejor, mediando incluso entre amig@s porque tu afán fue siempre el de sumar, el de liderar equipos, el de innovar  y siempre con tu imborrable sonrisa e inconmensurable profesionalidad.

Carlos y María, desde aquí, quiero que sepáis que también sois parte de esta familia que es Transinsa y que siempre estaremos aquí para ayudaros, con el mismo espíritu que vuestra madre siempre inspiró en nosotr@s. Descansa en paz, querida amiga, directora, luchadora: nos dejas un gran vacío y también una honda huella en nuestra memoria.