Los hoteles de Asturias pierden medio millar de estancias cada día

Empezando por el dato positivo, el de los 204.806 viajeros que se alojaron en junio en la hotelería asturiana, supone un incremento del casi el 2% sobre el mismo mes, pero de 2024. Y una cifra inédita en las cuentas hoteleras del Principado, que cerró el último año prepandemia, 2019, con 182.535 clientes, y que tenía su techo en los 203.011 turistas registrado en 2023.

Un aumento de viajeros que, sin embargo, no ha tenido eco en las pernoctaciones. Han venido más turistas, pero han estado menos tiempo alojados. En junio se vendieron 369.514 estancias hoteleras en Asturias, un 7,3% menos que en 2024 y, sobre todo, un 8% por debajo del récord de pernoctaciones hoteleras en un mes de junio: las 401.535 logradas en 2023.

Eso lleva a que el cómputo anual siga en negativos. En seis meses, por los hoteles del Principado pasaron 818.052 personas, que es lo mismo que decir que han restado un 20.162 clientes. De enero a junio, las pernoctaciones se quedaron en 1.485.377, cifra inferior a la del año pasado, cuando tras crecer un 15% respecto a la última cifra prepandemia, los hoteles asturianos vendieron 1.585.681 estancias. Doce meses después, han desaparecido 100.304 entradas de los libros de cuentas.

Pero la rentabilidad hotelera no se mide solo por el número de estancias vendidas, sino también por el precio a que se hace, el ingreso que generan y, sobre todo, la ocupación que se logra. La buena noticia es que en junio, los hoteles han estado por encima de la barrera del 50% de ocupación que separa la rentabilidad de los problemas económicos. La media de ocupación en fin de semana llegó al 60,02%. Lejos queda esta tasa, no obstante, de la media nacional, que subió al 72,7%, y, también, de la lograda por las comunidades de la cornisa cantábrica, con las que Asturias se vende bajo el paraguas de la España Verde. El País Vasco llegó al 73,51%. Cantabria, al 63%. Solo Galicia tuvo menos tasa de ocupación que Asturias, al llenar solo el 55,63% de sus plazas. En todo el país, además de Galicia quedaron por debajo de Asturias comunidades como Navarra (59,81%), Ceuta (59,53%), Castilla y León (58,20%), Aragón (57,39%), Castilla-La Mancha (54,22%) y Extremadura (49,41).

En cuanto al precio, la tarifa media diaria subió en Asturias un 8,95%, hasta llegar a 73,14 euros. Muy por debajo de la media del país, que rozó los 130 euros, y solo por encima de la de Castilla y León, cuyos hoteles cobraron 71,35 euros de media diaria, y los de Extremadura, que no llegaron a 68 euros. De la España Verde, fue Asturias la comunidad más barata. El precio medio en el norte osciló entre los 77,12 euros de la hotelería gallega y los 139 de la vasca.

Un precio bajo el asturiano que ha dejado, también, un bajo ingreso medio diario. En junio, por cada habitación disponible, los hoteles del Principado ingresaron 40,12 euros. Un 7,99% más que el año pasado. La media del país llegó a los 97 euros y solo en tres comunidades los hoteleros ingresaron menos que en Asturias. Ocurrió en Castilla y León, con 38,29 euros al día; en Castilla-La Mancha, con 37,68 euros; y en Extremadura, donde apenas llegaron a los 30 euros de ingreso medio diario. El resto de comunidades del norte hicieron más caja que Asturias. En Galicia llegaron a 41,60 euros cada día; en Cantabria, a casi 53 euros, y en el País Vasco superaron los 109.